Un contrato es un acuerdo jurídicamente exigible entre dos partes por bienes o servicios. Los contratos pueden ser orales o escritos, aunque generalmente se recomienda que los contratos sean por escrito y estén firmados por ambas partes.

Un contrato se forma cuando hay una oferta de hacer algo, una aceptación de esa oferta y una contraprestación. La contraprestación es el intercambio acordado entre las partes. Por ejemplo, cuando una persona contrata a un carpintero para construir una cama, el carpintero construye una cama a cambio del pago del precio acordado.

Una vez que las partes han llegado a un acuerdo sobre los términos del contrato, ambas están legalmente obligadas a cumplir con sus obligaciones en virtud del contrato. Si no lo hacen, han incumplido el contrato y pueden ser consideradas responsables ante un tribunal.

Rescindir de un contrato significa terminar legalmente el contrato antes de que ambas partes hayan cumplido con sus obligaciones según los términos del mismo. Existen diversas razones por las que una parte puede rescindir un contrato. El momento y la forma en que se resuelva el contrato determinarán si alguna de las partes tiene alguna responsabilidad por el incumplimiento del contrato antes de su resolución.

Después de rescindir un contrato, las partes no tienen ninguna obligación futura entre sí. Sin embargo, una o ambas partes pueden ser responsables por el incumplimiento de los términos del contrato antes de su terminación. Los términos del contrato también pueden determinar lo que ocurre después de la rescisión del contrato.

En ausencia de un lenguaje en el contrato que establezca lo que sucederá si se rescinde el contrato, las partes tienen la opción de buscar un remedio legal para cualquier incumplimiento. Hay varios recursos legales disponibles cuando se ha producido un incumplimiento de contrato.

  • Daños monetarios: Los daños compensatorios se conceden en un intento de poner a la parte inocente en la posición en la que habría estado si el contrato se hubiera cumplido.
    • En general, esto significa conceder a la parte inocente una cantidad de dinero que le dé el «beneficio de la negociación» o que le permita llegar a un acuerdo con otra persona por el mismo servicio. Los daños punitivos pueden concederse para castigar a la parte infractora, pero son mucho menos comunes.
  • Restitución: La restitución tiene por objeto poner a la parte inocente en la posición en la que se encontraba antes de celebrar el contrato. El tribunal examina lo que la parte que incumplió el contrato ganó antes del incumplimiento y ordena su devolución a la otra parte.
    • Por ejemplo, un cliente celebra un contrato con un carpintero para construir una cama. Después de que el carpintero construya la cama, el cliente se niega a pagar e incumple el contrato. La restitución requeriría que el cliente devolviera la cama.

  • Cumplimiento específico: Si la indemnización por daños y perjuicios es insuficiente para compensar a la parte inocente, el tribunal puede ordenar el cumplimiento específico. La parte infractora deberá cumplir con sus obligaciones en virtud del contrato o se enfrentará a cargos por desacato.

El cumplimiento específico rara vez se concede por incumplimiento de contrato, a menos que el objeto del contrato sea tan raro o único que ninguna cantidad de daños compensatorios pueda poner a la parte inocente en la posición en la que habría estado si no hubiera habido incumplimiento.

Las partes de un contrato pueden rescindir legalmente su acuerdo por varias razones.

Imposibilidad de cumplimiento. Si es imposible que una o ambas partes cumplan con sus obligaciones, el contrato puede ser rescindido. Debe ser imposible que alguien cumpla. Esto se llama imposibilidad objetiva. Si otra persona pudiera cumplir las obligaciones del contrato, no hay imposibilidad.

Un ejemplo de imposibilidad de cumplimiento es cuando alguien ha acordado pintar una casa, pero la casa se quemó antes de que pudiera ser pintada.

Fraude, tergiversación o error. Si el contrato se formó bajo circunstancias que constituyen fraude, tergiversación o error, el contrato puede ser resuelto. En esta situación no pudo haber un «encuentro de voluntades» sobre los términos del contrato porque las partes no conocían los hechos reales.

Legalidad. En algunos casos, el objeto del contrato puede convertirse en ilegal debido a que una ley fue aprobada después de la formación del contrato. Esta «ilegalidad sobrevenida» significa que el contrato no puede ser ejecutado legalmente y puede ser rescindido.

Incumplimiento del contrato. En virtud de los términos de cualquier contrato, ambas partes tienen la obligación de cumplir con el contrato. Si una de las partes no cumple, impide que la otra lo haga o viola los términos del contrato sin una justificación legal, ha incumplido el contrato y éste puede ser rescindido. La parte que no ha incumplido puede reclamar los daños y perjuicios causados por el incumplimiento.

Acuerdo previo. Las partes pueden acordar permitir la rescisión bajo ciertas circunstancias específicas. Esas condiciones específicas deben existir o, de lo contrario, se produce un incumplimiento del contrato. Este acuerdo previo es una cláusula de rescisión y es ejecutable siempre que ambas partes estén de acuerdo con sus términos.

Cuando quiera rescindir el contrato, el primer paso debe ser comprobar si hay una cláusula de rescisión en el contrato. Además de incluir las posibles razones por las que cualquiera de las partes puede rescindir su acuerdo, podría incluir instrucciones sobre cómo notificar a la otra parte que usted quiere poner fin al contrato.

El contrato podría describir cómo y cuándo debe darse el aviso. Por ejemplo, un contrato con una cláusula de rescisión podría establecer que el acuerdo puede ser rescindido por cualquiera de las partes, por escrito, dentro de los siete días siguientes a la firma del contrato.

Como regla general, la notificación de terminación de un contrato debe hacerse siempre por escrito. Cualquier conversación sobre la terminación del contrato en persona o por teléfono debe ser seguida por escrito. Compruebe siempre las instrucciones del contrato, incluyendo dónde y a quién enviar la notificación.

La rescisión es el término legal para cancelar o anular un contrato cuando ha habido fraude, tergiversación, error, coacción o influencia indebida. La rescisión esencialmente anula el contrato desde el principio, mientras que la terminación significa que las partes no tienen ninguna obligación de cumplir en el futuro.

La terminación de un contrato puede eximirle de otras obligaciones en virtud del acuerdo, pero podría dejarle vulnerable a una acción legal por incumplimiento de contrato. Si usted es parte de un contrato y desea rescindirlo, un abogado experto en contratos puede guiarle en el proceso y asesorarle sobre cualquier posible responsabilidad.

Un abogado con experiencia puede ayudarle a redactar un contrato, a resolver cualquier disputa que surja durante la ejecución del mismo y a representarle ante los tribunales si se ve involucrado en un pleito derivado de la rescisión del contrato.

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