A lo largo de los años, se han llevado a cabo considerables investigaciones y proyectos en este ámbito, aplicando las VANETs para una gran variedad de aplicaciones, que van desde la seguridad hasta la navegación y el cumplimiento de la ley. En diciembre de 2016, el Departamento de Transporte de los Estados Unidos propuso un proyecto de normas que harían que las capacidades de comunicación V2V fueran gradualmente obligatorias para los vehículos ligeros. La tecnología no está completamente especificada, por lo que los críticos han argumentado que los fabricantes «no podrían tomar lo que está en este documento y saber cuál será su responsabilidad bajo las Normas Federales de Seguridad de Vehículos de Motor». PKI (infraestructura de clave pública) es el actual sistema de seguridad que se utiliza en las comunicaciones V2V.
Conflicto por el espectroEditar
El V2V está amenazado por la televisión por cable y otras empresas tecnológicas que quieren arrebatarle una gran parte del espectro radioeléctrico actualmente reservado y utilizar esas frecuencias para el servicio de Internet de alta velocidad. En Estados Unidos, la parte del espectro radioeléctrico que le corresponde actualmente al V2V fue reservada por el gobierno en 1999, pero ha quedado sin utilizar. La industria del automóvil intenta retener todo lo que puede, alegando que necesita desesperadamente el espectro para el V2V. La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) se ha puesto del lado de las empresas tecnológicas, y el Consejo Nacional de Seguridad del Transporte apoya la posición de la industria del automóvil. Los proveedores de servicios de Internet (que quieren utilizar el espectro) afirman que los coches autónomos harán innecesaria la comunicación V2V. La industria automovilística estadounidense ha dicho que está dispuesta a compartir el espectro si el servicio V2V no se ve ralentizado o interrumpido; y la FCC planea probar varios esquemas de compartición.
Como los gobiernos de diferentes lugares apoyan espectros incompatibles para la comunicación V2V, los fabricantes de vehículos pueden verse disuadidos de adoptar la tecnología para algunos mercados. En Australia, por ejemplo, no hay espectro reservado para la comunicación V2V, por lo que los vehículos sufrirían interferencias de las comunicaciones no vehiculares. Los espectros reservados para las comunicaciones V2V en algunas localidades son los siguientes:
Localidad | Espectro |
---|---|
EEUU | 5,855-5.905 GHz |
Europa | 5,855-5,925 GHz |
Japón | 5,770-5,850 GHz; 715-725 MHz |
Australia | 5,855-5,925 GHz |