La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es un cofactor en múltiples reacciones enzimáticas, incluida la de la síntesis del colágeno. Debido a la ausencia de la enzima L-gulonolactona oxidasa, los seres humanos son incapaces de sintetizar el ácido ascórbico, por lo que se reconoce como un nutriente esencial. El escorbuto se refiere a la presentación clínica de una deficiencia de ácido ascórbico, que se produce como resultado de una ingesta dietética inadecuada. Durante mucho tiempo se ha considerado una enfermedad de importancia histórica más que contemporánea. Sin embargo, la tendencia a las dietas occidentales ricas en alimentos procesados y carentes de productos frescos ha dado lugar a la reaparición de la enfermedad en el mundo desarrollado. Las pruebas actuales sugieren que hay un resurgimiento del escorbuto en Sydney. Se presenta un caso de un varón de 35 años, por lo demás sano, que acudió a la clínica dental de urgencias de un hospital con encías rojas y empapadas generalizadas. El examen clínico reveló una afectación bilateral de las encías bucales y linguales/palatinas, tanto en la arcada mandibular como en la maxilar, que afectaba predominantemente a las papilas interdentales. El examen radiográfico confirmó que no había pérdida ósea asociada ni patología ósea. El diagnóstico diferencial clínico incluía leucemia, sarcoma de Kaposi o posible escorbuto. Una batería de investigaciones serológicas dio como resultado el diagnóstico final de deficiencia grave de ácido ascórbico (nivel de vitamina C <5µmol/L, VIH negativo y películas de sangre y recuentos sanguíneos que no mostraban características de leucemia). Inmediatamente se instituyó una ingesta dietética además de un suplemento de vitamina C de 250 mg diarios. El estado mejoró en unas semanas y se resolvió por completo en 3 meses (el nivel de vitamina C progresó a 55 µmol/L) y se educó al paciente para que mantuviera en lo sucesivo una ingesta nutricional adecuada de ácido ascórbico. Aunque estos casos serán poco frecuentes, los clínicos prudentes deben volver a familiarizarse con los signos y síntomas del escorbuto y mantener un amplio radar de diagnóstico para asegurar un diagnóstico rápido y preciso.