El invierno está a punto de llegar y esperamos con impaciencia esas mañanas neblinosas y esas hermosas y crujientes tardes. La estación está marcada por las verduras frescas y bonitas, como las de hoja verde o los tubérculos con almidón. Es bueno aprovechar estas delicias mientras dure la temporada. Una de esas hortalizas que nos encantan son las jugosas y crujientes zanahorias. Muy pronto, las verdulerías y los supermercados estarán repletos de zanahorias, y hay muchas razones por las que debes cargar tu bolsa de la compra con esta deliciosa verdura. Según la doctora Sheela Manglani, nutricionista afincada en Bangalore, «las zanahorias son una buena fuente de betacaroteno, que es un pigmento natural que el cuerpo utiliza para producir vitamina A, y tienen una buena cantidad de fibra». La nutricionista macrobiótica Shilpa Arora sugiere añadir zanahorias en la dieta diaria para evitar el estreñimiento. «Las zanahorias crudas a diario solucionan el problema del estreñimiento. Las zanahorias también ayudan a mantener un colesterol saludable y a prevenir enfermedades del corazón. Al ser ricas en potasio, ayudan a reducir el colesterol y la retención de líquidos». Pero, ¿sabías que comer zanahorias te ayudará a controlar tu peso? Sí, así es.
La dieta de comer zanahorias te ayudará a perder peso. ¿Por qué te lo preguntas? Es porque son naturalmente bajas en calorías y están llenas de nutrientes que pueden ayudar a tus esfuerzos de pérdida de peso. Una taza de palitos de zanahoria crudos tiene sólo 50 calorías, lo que supone sólo el tres por ciento del presupuesto calórico diario de una dieta de 1.500 calorías. Si estás intentando perder peso de la forma más saludable posible, comer palitos de zanahoria te ayudará a hacerlo posible. Sin embargo, las zanahorias hervidas son ligeramente más calóricas, con 54 calorías por taza. Así que, sea cual sea el tipo que elijas, puedes hacer fácilmente que las zanahorias formen parte de tu dieta para perder peso.
Las zanahorias están repletas de vitaminas, especialmente de vitamina A. Nuestro cuerpo convierte la vitamina A de los alimentos en unas sustancias químicas llamadas retinoides, que interactúan con nuestras células grasas e influyen en el crecimiento de nuevas células grasas, el almacenamiento de grasa y la obesidad, según un estudio publicado en Archives of Biochemistry and Biophysics. El estudio descubrió que la vitamina A puede ayudar a reducir la obesidad abdominal o grasa del vientre, que tiene algunos riesgos graves para la salud.
Y no sólo eso, las zanahorias ofrecen una pequeña pero significativa cantidad de fibra por ración: alrededor del 14 por ciento del valor diario en una taza de zanahorias crudas, y el 18 por ciento en una taza de zanahorias hervidas. Comer verduras ricas en fibra es bueno para perder peso, ya que la fibra tarda más en ser digerida y mantiene a raya las punzadas de hambre.
Así que, ¿a qué esperas? Hazte un zumo, hiérvelas o añade zanahorias a tus platos y tentempiés, pero no cometas el error de perderte este invierno este almacén de nutrientes para perder peso de forma natural.