• Cristina D’Almeida

Cuando la gente piensa en el teatro, es probablemente uno de los símbolos más conocidos que le vienen a la mente con muchas interpretaciones que van más allá del mero significado de comedia y tragedia, feliz y triste. El símbolo de la comedia y la tragedia se remonta a la mitología griega y ha sido la representación central de las artes creativas durante décadas. Esto incluye el teatro, el cine y la televisión. Es uno de mis símbolos favoritos y sigue siendo muy utilizado hoy en día.

Si nos remontamos a la antigua Grecia, se dice que estas máscaras se utilizaban en las primeras obras de teatro para representar las emociones que sentían los personajes. Era más fácil para los miembros del público que estaban sentados lejos del escenario ver las máscaras y las emociones que representaban.

En aquella época, a las mujeres no se les permitía actuar en ninguna de las obras, por lo que los hombres podían llevar estas máscaras, especialmente si tenían que interpretar un papel femenino. La gente suele pensar que estas máscaras eran sólo un símbolo o un diseño creado por los primeros actores, pero en realidad empezó siendo una máscara tangible que se llevaba. Se consideraba una pieza de vestuario y luego se hizo más presente hasta llegar a ser muy conocida y un símbolo mundial.

En un sentido histórico, hay dos nombres para cada máscara. El nombre Melpómene representa la máscara de la tragedia o Musa de la Tragedia y el nombre Talía representa la máscara de la comedia o Musa de la Comedia. Melpo es el nombre más corto de Melpómene, que significa celebración de la danza y el canto.

Aunque no parece demasiado apropiado, porque Melpómene es la máscara de la tragedia, sí encaja en un sentido teatral en general. Thalia viene del verbo griego thallein que significa florecer o estar verde. Melpómene y Talía eran las hijas de Zeus.

La gente suele relacionar las máscaras con Dionisio originalmente. Dionisio es el dios griego del vino. Las máscaras representan las emociones alegres y tristes que puede provocar el consumo de vino. También se han relacionado con el dios griego Jano, conocido como el dios bifronte de los comienzos. Se dice que Jano prestó el nombre a las máscaras.

A lo largo de los años, se han diseñado muchas versiones de las máscaras, pero todas representan las mismas emociones básicas de felicidad y tristeza. Por supuesto, hay algunas versiones modernas de las máscaras, pero nada totalmente fuera de lo común.

Creo que es interesante profundizar en algunas de las obras reales que se consideran comedias y tragedias en el teatro. Las obras de Shakespeare son un género popular que nos viene a la mente cuando pensamos en esos dos tipos de obras tan distintas porque Shakespeare escribe literalmente comedias y tragedias.

Algunas tragedias que nos vienen a la mente al instante son Macbeth, El Rey Lear, Otelo, Romeo y Julieta y Julio César. Algunas comedias que me vienen a la mente son Mucho ruido y pocas nueces, La comedia de las equivocaciones, Noche de Reyes y Como gustéis.

Todos ellos son mis favoritos absolutos y creo que son los que más se distinguen al pensar en comedias y tragedias. El teatro no es lo mismo sin este símbolo y es recordado por tantos.

Tanto si se relaciona con la época de la antigua Grecia como si se trata de una afirmación general en las artes, siempre se relaciona con el teatro y creo que es algo que se recordará dentro de cientos de años. Es la cara de las artes, pero es la raíz de las artes.

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