En estos días, es casi imposible desplazarse a través de Instagram sin ver una foto de un blogger o celebridad luciendo un puchero artificialmente rellenado. Según datos recogidos por la Sociedad Americana de Cirujanos Plásticos, las solicitudes de mejoras en los labios aumentaron un 50% entre 2000 y 2016. Eso es un montón de relleno.

Sin embargo, como informa NewBeauty, una tendencia de labios diferente ha estado apareciendo en las redes sociales en los últimos tiempos – uno diseñado para reducir el tamaño de los labios. Según la Dra. Melissa Doft, cirujana plástica de Nueva York, especializada en cirugía plástica estética, los procedimientos de reducción de labios tienden a ser más populares en los países asiáticos. Como explica la Dra. Doft, el procedimiento consiste en «eliminar la piel de los labios a lo largo del borde seco-húmedo del bermellón» y utilizar puntos de sutura para crear una nueva línea de labios. El resultado es unos labios más pequeños y finos.

Aunque la reducción de labios se realiza de forma ambulatoria, no se equivoque: es una cirugía. Los pacientes suelen ser sometidos a anestesia local durante el procedimiento -que dura entre 15 y 30 minutos por labio, dependiendo de la cantidad de tejido que se vaya a eliminar- y los puntos de sutura permanecen en su lugar durante una semana, tras la cual se disuelven o se retiran manualmente. El dolor, dice el Dr. Doft, es tolerable, pero se aconseja a los pacientes que «sigan una dieta blanda hasta que se resuelva la hinchazón», lo que puede llevar desde un par de días hasta una semana.

La Dra. Ava Shamban explica las inyecciones en los labios:

El procedimiento es también, como es lógico, más caro que las inyecciones. Mientras que los rellenos pueden costar entre 500 y 2.000 dólares (por jeringa), la cirugía de reducción de labios cuesta una media de entre 1.000 y 3.000 dólares, según DocShop. Los precios son más elevados según el lugar donde se viva: En Nueva York, por ejemplo, la cirugía de reducción de labios puede costar más de 7.000 dólares. Sin embargo, es permanente, a diferencia de las inyecciones, que suelen empezar a disolverse en un año (y, por tanto, requieren repetidas inyecciones para mantenerlas).

Solo en Instagram hay más de 5.000 publicaciones con la etiqueta #lipreduction. Sin embargo, al menos en los Estados Unidos, el aumento de labios, como los rellenos, sigue siendo el procedimiento facial du jour, y eso probablemente no va a cambiar pronto. A continuación puede ver cómo es el procedimiento (pero le advertimos que algunas de estas fotos son un poco gráficas). Y, como siempre, si está pensando en someterse a una cirugía estética o plástica de cualquier tipo, investigue. La mejor manera de asegurar un resultado positivo es acudir a un médico altamente capacitado, bien recomendado y certificado por la junta.

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