Tener la sensación de que alguien puede estar mintiendo es uno de los peores sentimientos del mundo. No es algo en lo que se sienta bien insistir, pero a veces es importante dar un paso atrás y evaluar la situación por lo que es. En este sentido, es importante saber: ¿Qué hay que hacer para pillar a alguien en una mentira? Science of Us nos señala un artículo reciente del New York Times que presenta un consejo sencillo pero eficaz. En resumen: pídale al mentiroso que se explaye.
A menudo es tentador asumir que una mentira es inocua; de hecho, todo el mundo dice pequeñas mentiras blancas, y hay veces en que estas mentiras no malévolas no son realmente un gran problema. Pero si sientes que se está faltando a tu confianza, te debes a ti mismo escuchar la verdad – y a veces eso significa presionar para obtener más detalles para llegar al fondo de las cosas.
Primero, sin embargo, un descargo de responsabilidad (esperemos que sea obvio): Incluso si estás bastante seguro de que alguien te está mintiendo, nunca está bien husmear en su teléfono o confrontarlo de una manera que sea amenazante o lo haga sentir inseguro. Si alguien no es honesto contigo, tienes todo el derecho a enfadarte, pero no puedes obligar a nadie a decirte nada, aunque estés seguro de que te está mintiendo. Sé que es difícil de digerir, pero es importante tenerlo en cuenta.
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Entonces, ¿qué puedes hacer para pillar a alguien en una mentira? Bueno, cuando las personas mienten, (generalmente) tienen una historia preparada; anticipan razonablemente la necesidad de aclarar cierta cantidad de detalles basándose en las preguntas que creen que les harás, y entonces forman una historia que responde a esas preguntas pero que proporciona poca otra información. Si pides una aclaración, es muy probable que la persona que miente repita la misma historia una y otra vez… así que es coherente, pero no ofrece más información.
Esto es lo que hay que hacer en su lugar: No pedir una aclaración, sino una elaboración. En serio – puede ser así de simple para romper la mentira de alguien. En el artículo del New York Times, Edward Geilsman, profesor emérito de la Universidad de California en Los Ángeles, sugiere hacer que la gente cuente su historia al revés; si estás mintiendo, se necesita mucha gimnasia mental y conciencia para no atraparte en los detalles una vez que ya no estás contando la historia según el guión que has elaborado previamente. También sugiere formular las preguntas de forma abierta y dejar mucho silencio y espacio para que la persona responda sin necesidad de animarla o de que usted rellene los espacios en blanco.
La razón por la que esta técnica funciona tiene que ver con lo que los mentirosos buscan en nuestras reacciones ante ellos. A menudo, cuando las personas mienten, están prestando atención a la afirmación positiva de que usted cree lo que están diciendo: Cosas como asentir, sonreír y rellenar las pausas con frases como «Oh, tienes mucha razón» o «Sé lo que quieres decir». Estas son reacciones normales al escuchar una historia en general, pero si alguien está mintiendo, es probable que busque esas cosas en particular para confirmar que su mentira está funcionando. Si sospechas y te resistes a hacer esas cosas, la persona que miente puede empezar a desmoronarse por dos razones: No sólo su cerebro está trabajando duro para rellenar los agujeros de su historia, sino que, además, no puede saber si te lo estás creyendo o no.
Ahora bien, si alguien no está mintiendo realmente, debería ser capaz de contar su historia en un orden diferente o rellenar detalles adicionales sin mucho problema. Sin embargo, si alguien no está mintiendo realmente y usted lo interroga absolutamente sobre lo que es, al final, una cosa pequeña, es posible que se moleste con usted. Por eso es importante que te acerques a este enfoque sabiendo que tal vez no obtengas la respuesta que buscas. No puedes obligar a la gente a decir la verdad, sobre todo si ya te la están diciendo y no te gusta. Sin embargo, si sospechas que alguien te está mintiendo, lo mejor que puedes hacer es presionarle para que sea más sincero y esperar que te respete lo suficiente y valore vuestra relación lo suficiente como para ser sincero.
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