Una tienda de H&M en Estocolmo está poniendo a prueba un programa de reciclaje de ropa que convierte las fibras viejas en prendas nuevas.
La máquina, llamada Looop, es el primer sistema de reciclaje de ropa en tienda del mundo y supone un paso hacia la moda circular, un sistema en el que los materiales se mantienen en uso el mayor tiempo posible. Limpia, tritura y teje la ropa vieja y no deseada para convertirla en nuevos materiales sin utilizar agua ni tinte. Según H&M, Looop combina las fibras de la ropa reciclada con «algún material de origen sostenible» para reforzar el tejido. LIVEKINDLY se ha puesto en contacto con H&M para confirmar el material y qué porcentaje del mismo se utiliza en la ropa fabricada por Looop.
«El lanzamiento de Looop no es sólo un vistazo al futuro de la moda. Es un recordatorio de que hay que tratar toda la ropa como un recurso», dice la empresa en un comunicado de prensa. «Nada está demasiado roto para ser reciclado, y ninguna prenda debería acabar en la basura. El reciclaje es también muy importante para que la moda circular funcione. A menos que la gente devuelva sus prendas viejas al sistema, no habría ropa con la que hacer otras nuevas».
El problema de los residuos de ropa de la moda rápida
La moda rápida -la ropa barata de tendencia- es una fuerza dominante en la industria. Según la Fundación Ellen MacArthur, una organización benéfica británica que promueve una economía de la moda circular, cada segundo se quema el equivalente a un camión de basura de productos textiles. Se calcula que perdemos 500.000 millones de dólares cada año por la ropa que apenas se usa.
La industria de la moda también tiene un enorme impacto medioambiental. La ropa libera en el océano el equivalente a 50.000 millones de botellas de plástico -pequeñas partículas de plástico- cada año. Si la moda sigue como hasta ahora, en 2050 la industria utilizará una cuarta parte del presupuesto mundial de carbono.
H&M forma parte de la iniciativa Make Fashion Circular de la Fundación Ellen MacArthur, que se centra en la creación de una economía de la moda en la que la ropa se utilice más, se haga para ser reciclada y se fabrique con materiales reciclados y renovables. El gigante de la moda rápida, que tiene un programa de reciclaje desde 2013, se enfrentó a la controversia en 2018 por los 4.300 millones de dólares de existencias no vendidas, un testimonio de la gran cantidad de ropa que se produce. Gran parte de esa ropa se quemó, pero H&M emitió un comunicado en el que decía que sólo quemaba la ropa infestada de moho o contaminada con plomo.
Además de unirse a la iniciativa de la Fundación Ellen MacArthur, H&M ha sacado a la venta colecciones con materiales que podrían allanar el camino hacia una industria de la moda más sostenible, como el cuero vegano fabricado con subproductos del proceso de elaboración del vino y la seda hecha con residuos de la industria de los zumos de cítricos.
La máquina Looop fue desarrollada por el Instituto de Investigación de Textiles y Prendas de Vestir de Hong Kong (HKRITA) con la Fundación H&M sin ánimo de lucro. Por el momento solo está disponible en la sede de Drottninggatan 56 en Estocolmo, pero HKRITA pretende licenciar la tecnología a través de las marcas de moda con el fin de provocar un mayor cambio dentro de la industria.
Este post fue modificado por última vez el 15 de diciembre de 2020 7:11 am