Después de la caída de Saigón, Mai y Henry Huynh emigraron de Vietnam con el sueño de construir una nueva vida en los Estados Unidos de América. Instalados en el soleado sur de California, los Huynh estaban listos para un nuevo comienzo, pero no sabían por dónde empezar. Henry consiguió un empleo en una empresa líder en tecnología aeroespacial y de defensa, mientras que Mai encontró trabajo como manicurista y estudió la dinámica de la floreciente industria de las uñas.
La pareja trabajó duro en sus respectivos campos, ahorrando hasta el último céntimo con el doble objetivo de formar una familia y construir un negocio.En 1983, Mai y Henry presentaron al público su primer salón de uñas. Situado en Newport Beach, en la legendaria Pacific Coast Highway, el salón recibió el acertado nombre de «Happy Nails & Spa». Al año siguiente, dieron la bienvenida al mundo a su primer hijo.
La filosofía de su salón era sencilla: servicios de calidad, precios razonables y un entorno de lujo equivalen a «uñas felices». La adhesión a este concepto se ha convertido en la fuerza impulsora del crecimiento de Happy Nails & Spa.