Utilicé una membrana de nitrógeno y un criorefrigerador Stirling para licuar el nitrógeno del aire. Para este video me asocié con Starbucks para celebrar su Nitro Cold Brew. Pide uno aquí: https://starbucks.app.link/derekmuller
Hacer nitrógeno líquido es difícil – de hecho hasta hace 150 años los científicos dudaban si era posible licuar el nitrógeno. En 1823, en la institución real de Londres, Michael Faraday produjo por primera vez cloro líquido, de forma un tanto accidental al someterlo a alta presión. Del mismo modo licuó el amoníaco.
Tomando prestada una mezcla de Thilorier en Francia, una combinación de hielo seco, nieve y éter, alcanzó una temperatura de -110C. En 1845 utilizó esta mezcla más una bomba manual para presurizar los gases para licuar todos los gases conocidos excepto seis, que incluían el oxígeno y el nitrógeno. Estos se conocieron como los gases «permanentes».
Un físico francés Aimé comprimió oxígeno y nitrógeno en tanques y luego los bajó al océano a más de 1,6 km de profundidad, donde la presión llegó a 200 atmósferas. Sin embargo, los gases no se licuaron.
Sólo a finales de 1877 se produjeron las primeras gotas de oxígeno líquido y nitrógeno líquido, por Cailletet en Francia. Primero probó con el oxígeno comprimiéndolo hasta 300 atmósferas, enfriado a -30C, pero eso no fue suficiente para licuar el oxígeno. Pero cuando liberó repentinamente la presión, el gas en expansión se enfrió, según estima, a -200C y vio una niebla y luego gotas deslizarse por las paredes de su recipiente.
Es sorprendente lo lejos que hemos llegado en el sentido de que ahora puedo comprar un refrigerador criogénico a base de helio. Comprime y expande el gas para absorber el calor de la punta del dedo frío y expulsarlo a los alrededores a temperatura ambiente.