La gestión de la tesorería se refiere a la recaudación, el manejo, el uso y la inversión (a corto plazo) del efectivo. En otras palabras, es la gestión del efectivo que entra y sale de una empresa.

La gestión del efectivo abarca un amplio ámbito de las finanzas. Incluye la evaluación del flujo de caja y la liquidez del mercado. También incluye la evaluación de las inversiones.

La gestión eficaz de la tesorería es algo más que evitar la insolvencia. También implica conseguir que los clientes paguen a tiempo. Sobre todo, se trata de hacer todo lo posible para mejorar la rentabilidad financiera de la empresa.

Para una pequeña empresa, una gestión eficaz de la tesorería podría representar la diferencia entre la vida y la muerte.

Gestión de la tesorería: evitar la insolvencia

La gestión de la tesorería es probablemente la tarea más importante de los gestores de empresas. Si una empresa no puede pagar las facturas a su vencimiento porque no tiene suficiente efectivo, es insolvente. De hecho, la insolvencia es el principal motivo de quiebra.

La gestión eficaz de la tesorería es crucial para la supervivencia de una nueva empresa. También es vital para una empresa en expansión. El flujo de caja puede ser un problema para una pequeña empresa con muchos clientes. Incluso las empresas que venden el mejor producto del mercado pueden tener problemas de tesorería.

Una empresa con problemas de tesorería está a merced de los elementos. En pocas palabras, no tiene margen de seguridad. Cuando aparecen gastos que no había previsto, está en problemas.

Las pequeñas empresas tienen menos acceso al crédito que las grandes. Por lo tanto, deben depender en gran medida de su propio dinero para cumplir con las obligaciones.

La gestión de la tesorería en la banca

La gestión de la tesorería en la banca se refiere a los servicios que los bancos ofrecen a las grandes empresas. Se trata de servicios de flujo de caja.

Los servicios incluyen la contabilidad de saldo cero, las instalaciones automatizadas de la cámara de compensación y la concentración de efectivo.

Hay programas de software que automatizan la forma en que una empresa cobra el dinero de los clientes. También existen servicios de Internet, cámaras de compensación, concentración de efectivo e informes de saldos.

Los servicios de vehículos blindados y las cajas de seguridad son opciones alternativas. Un lockbox es un apartado postal al que tiene acceso el banco de la empresa.

La normativa bancaria relativa a los servicios bancarios se ha vuelto muy estricta. Desde la crisis financiera de 2007/8 y el crecimiento del blanqueo de dinero internacional, las autoridades han endurecido su normativa.

El dinero en efectivo se refiere únicamente a las monedas y billetes. Sin embargo, en la gestión del efectivo, las empresas también trabajan con equivalentes de efectivo. Los equivalentes de efectivo son activos que podemos convertir fácilmente en efectivo.

Trabajar con equivalentes de efectivo es cada vez más común en esta era electrónica. Hoy en día, el sistema monetario es menos físico y más abstracto de lo que solía ser.

Cambridge Dictionaries Online tiene dos definiciones para la gestión del efectivo:

1. Finanzas: «La actividad de controlar las cantidades pagadas y recibidas por una empresa y los momentos en que se realizan y reciben estos pagos.

2. Banca: «La gestión por parte de un banco del dinero de sus clientes con el fin de que el cliente obtenga el mayor beneficio posible».

Vídeo – gestión de efectivo y banca

En este vídeo del Deutsche Bank, Jeffrey Bisig habla de la importancia del cumplimiento normativo y de las herramientas contra el blanqueo de capitales. También habla de los servicios de gestión de efectivo en Estados Unidos.

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