Cuando una mujer se queda embarazada, uno de los mayores cambios que experimenta es un cambio en su figura. Todo se vuelve más grande, desde los pechos hasta la barriga y todo lo que hay en medio. Esto puede hacer que las mujeres suban una o varias tallas de ropa. Algunas mujeres quieren seguir estando a la moda durante todo el embarazo y no renunciar a su vestuario actual. Otras quieren seguir las últimas tendencias de la moda. Esto también se debe, en parte, a que muchas mujeres piensan que cuando se quedan embarazadas también tienen que pasar de moda. Sin embargo, se puede estar embarazada a la moda. Sin embargo, cabe preguntarse cuál es el problema de llevar ropa ajustada durante el embarazo:
Llevar ropa ajustada durante el embarazo puede tener muchas implicaciones. Por un lado, la ropa ajustada puede impedir la correcta circulación de los fluidos dentro del cuerpo. El volumen de sangre de una mujer embarazada puede duplicarse hasta en un cincuenta por ciento, lo que puede causar hinchazón y malestar. Llevar ropa ajustada durante el embarazo, especialmente durante largos periodos de tiempo, puede empeorar aún más la hinchazón.
Llevar ropa ajustada durante el embarazo también puede causar molestias digestivas. La ropa ajustada durante el embarazo puede hacer que los músculos abdominales y otra parte del tracto digestivo se contraigan. Esto puede hacer que afecciones como la acidez y las náuseas matutinas sean peores de lo que ya son.
Por último, la ropa ajustada puede provocar infecciones bacterianas y/o fúngicas en la zona íntima de la mujer embarazada. Esto puede manifestarse en irritaciones como la vaginosis bacteriana y/o las infecciones por hongos, por nombrar algunas. Esto se debe a que la ropa ajustada permite que se reproduzcan más bacterias dañinas. Esto puede ser peligroso para el feto. Esto es especialmente cierto si no se trata. Las infecciones no tratadas pueden provocar complicaciones en el embarazo. Complicaciones como el parto prematuro, la cesárea y/o incluso la muerte neonatal.