Enfermedad ósea metabólica
Los reptiles que se alimentan principalmente de insectos o plantas corren el riesgo de desarrollar una enfermedad ósea metabólica, que está causada por un desequilibrio en los niveles de calcio, fósforo y vitamina D en sus cuerpos. Las serpientes y otros reptiles carnívoros que se alimentan de presas enteras generalmente obtienen suficiente calcio y vitamina D en sus dietas, y la enfermedad ósea metabólica rara vez es un problema para ellos.
Síntomas y tipos de MBD
Los síntomas típicos de la enfermedad ósea metabólica incluyen:
- Piernas flacas
- Piernas arqueadas
- Bultos duros a lo largo de las piernas, columna vertebral, o la mandíbula
- Ablandamiento y flexibilidad inusual de la mandíbula inferior
- Dificultad para levantar el cuerpo del suelo
- Disminución del apetito
Si los niveles de calcio en la sangre llegan a ser muy bajos, puede producirse depresión, letargo, espasmos, temblores, debilidad de las extremidades posteriores, convulsiones y la muerte.
El caparazón de una tortuga puede volverse inusualmente blando, acampanado en los bordes o puntiagudo en la parte trasera. Si las grandes «escamas» del caparazón de una tortuga (o escudos) tienen una forma piramidal anormal, debe sospecharse de una enfermedad ósea metabólica.
Causas de la enfermedad ósea metabólica en los reptiles
La enfermedad ósea metabólica suele desarrollarse cuando los niveles dietéticos de calcio o vitamina D son demasiado bajos, los niveles de fósforo son demasiado altos, y/o cuando una exposición inadecuada a las longitudes de onda ultravioleta-B de la luz dificulta la producción normal de vitamina D y el metabolismo del calcio dentro del cuerpo de un reptil.
Diagnóstico
Un veterinario suele diagnosticar la enfermedad ósea metabólica basándose en los signos clínicos del animal, la dieta y el acceso a la luz ultravioleta-B; también pueden ser necesarias radiografías y/o análisis de sangre, incluyendo mediciones de los niveles de calcio.
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Tratamiento
Un reptil que sólo está levemente afectado por la enfermedad ósea metabólica suele recuperarse completamente con mejoras en la dieta, suplementos de calcio y vitamina D y un mayor acceso a la luz ultravioleta de espectro completo. Los casos más graves requieren inyecciones de calcio y vitamina D, suplementos orales, fluidoterapia y apoyo nutricional. Las inyecciones de la hormona calcitonina también pueden ser útiles una vez iniciada la administración de suplementos de calcio. Si un reptil sufre roturas de huesos como consecuencia de la enfermedad ósea metabólica, pueden ser necesarias férulas u otras formas de estabilización.
Vida y Manejo
Los propietarios de reptiles deben prestar mucha atención a la dieta de sus mascotas y a las condiciones ambientales si se quiere evitar la enfermedad ósea metabólica. Los alimentos ricos en calcio para los herbívoros incluyen la col, la col rizada, el quimbombó, las coles de Bruselas, la alfalfa, la calabaza, las bayas y el melón. Los suplementos de calcio y vitamina D también son necesarios para los reptiles que se alimentan principalmente de material vegetal o de insectos. Los insectos alimentadores deben ser criados con una dieta nutritiva, alimentados con comida sana antes de darlos a los reptiles, y espolvoreados con un suplemento apropiado de vitaminas y minerales. Tenga cuidado de no abusar de los suplementos de calcio y vitamina D, ya que puede dar lugar a otros problemas médicos que pueden ser tan graves como los asociados a la enfermedad ósea metabólica.
Las tortugas, los galápagos y las especies de lagartos que son principalmente activos durante el día necesitan tener acceso a la luz ultravioleta B. Deben utilizarse bombillas de espectro completo que produzcan UVB dentro del terrario. Dependiendo de la mascota, a veces se puede utilizar la luz solar natural, ya que es la mejor fuente de estas longitudes de onda.
Tenga en cuenta, sin embargo, que los reptiles nunca deben estar expuestos a la luz solar directa cuando están alojados dentro de un recinto de vidrio o plástico. Estos materiales no sólo filtran las longitudes de onda beneficiosas, sino que los animales pueden sobrecalentarse rápidamente y morir.