Cuando se toma la decisión de someterse a un trasplante de células madre o médula ósea, hay varios pasos en el proceso. Los pasos son prácticamente los mismos, independientemente del tipo de trasplante que vaya a recibir.

Evaluación y preparación para un trasplante

Primero se evaluará al paciente para determinar su elegibilidad para un trasplante. Un trasplante es algo muy difícil para su cuerpo. Para muchas personas, los trasplantes pueden significar una cura, pero en algunas personas pueden ocurrir complicaciones graves incluyendo la muerte. Usted querrá considerar los beneficios y los riesgos antes de tomar una decisión.

Los trasplantes también pueden resultar emocionalmente difíciles. Suelen requerir estar en el hospital, aislado y existe un alto riesgo de efectos secundarios. Muchos de los efectos secundarios son a corto plazo, pero otros pueden continuar por años. Esto puede significar cambios en su estilo de vida. Para algunas personas estos cambios son solo por un tiempo, mientras que para otras pueden durar toda la vida. Algunos de los efectos secundarios son realmente desagradables y pueden ser graves. El equipo de atención médica hará todo lo posible para que se sienta cómodo, aunque es posible que no se puedan controlar o aliviar algunos de los efectos secundarios.

Antes de recibir un trasplante, es necesario que converse con sus médicos sobre el proceso de trasplante y todos sus efectos. También resulta útil hablar con otras personas que ya han sido sometidas a trasplantes.

Asimismo es muy difícil pasar semanas y meses sin saber cómo resultará su trasplante. Esto requiere mucho tiempo y mucha energía emotiva de parte del paciente, de los encargados de su cuidado y de los seres queridos. Es muy importante contar con el apoyo de los seres queridos. Usted necesitará, por ejemplo, un adulto responsable que esté con usted para darle los medicamentos, ayudarle a estar pendiente a los problemas y comunicarse con el equipo de trasplante una vez que se vaya a casa. Su equipo de trasplante ayudará tanto a usted como a la persona a cargo de su cuidado a aprender lo necesario. Además el equipo de atención médica puede ayudarles a usted y a sus seres queridos a sobrellevar los altibajos mientras se prepara y pasa por el trasplante.

Para determinar cuán bien puede tolerar el proceso de trasplante, le realizarán muchos estudios médicos diferentes y le harán varias preguntas. Entre los cuales se incluyen:

  • Tipificación HLA del tejido, (esto es un análisis de sangre)
  • Un historial médico y examen físico completo
  • Evaluación de su estabilidad psico-emocional
  • Identificación de quién será la persona principal a cargo de su cuidado durante el proceso del trasplante
  • Biopsia de médula ósea (este es un procedimiento médico que ocurre en el hospital o clínica)
  • Tomografía computarizada (CT) o imagen por resonancia magnética (MRI)
  • Pruebas del corazón, tales como electrocardiograma (EKG) o ecocardiografía
  • Estudios de los pulmones, tales como radiografías y pruebas de la función pulmonar
  • Citas con otros miembros del equipo de trasplante, como un dentista, dietista o trabajador social
  • Análisis de sangre, tales como un recuento sanguíneo completo, análisis bioquímicos de sangre y detección de virus, como hepatitis B, CMV y VIH

También requerirá hablar con su compañía de seguro médico sobre los costos asociados que podría tener que pagar.

Es posible que tenga un catéter venoso central (CVC) colocado en una vena grande de su pecho. Esto se hace más frecuentemente como una cirugía para pacientes ambulatorios y generalmente sólo se necesita anestesia local (se adormece el lugar donde va colocado el catéter). Las enfermeras usarán este catéter para la extracción de sangre y administración de medicamentos.

Si se va a someter a un autotrasplante, se puede colocar un catéter especial que también se puede usar para extraer o recolectar las células madre.

El CVC permanecerá colocado durante su tratamiento y por algún tiempo después, por lo general hasta que sus células madre trasplantadas se hayan injertado y sus recuentos sanguíneos se hayan normalizado de forma consistente.

Elegibilidad para el trasplante

Las personas más jóvenes, las personas que se encuentran en las etapas (estadios) tempranas de la enfermedad, o aquellas que no han recibido muchos tratamientos suelen tener mejores resultados con los trasplantes. Algunos centros de tratamiento establecen límites de edad para los trasplantes. Algunas personas asimismo pueden no ser elegibles para un trasplante si tienen otros problemas de salud importantes, tales como una enfermedad cardíaca, pulmonar, hepática, o renal grave. Un minitrasplante, detallado bajo Alotrasplante de células madre en Tipos de trasplante de células madre para el tratamiento del cáncer puede ser una opción para algunas de estas personas.

Hospitalización o tratamiento ambulatorio para trasplantes

El equipo de profesionales de trasplantes del hospital determinará si necesitará hospitalizarse para recibir su trasplante o si el procedimiento se hará de manera ambulatoria, o bien, si se hospitalizará solo durante algunas partes del procedimiento. Si tiene que estar en el hospital, probablemente acudirá el día antes de que comience el tratamiento de quimioterapia o radiación previo al trasplante (vea la próxima sección). El equipo de trasplante se asegurará de que usted y su familia entiendan el proceso y quieran continuar con el procedimiento.

Si usted recibirá todo o parte de su tratamiento de forma ambulatoria, será necesario que se encuentre muy cerca del centro de trasplantes durante las etapas iniciales. Necesitará que algún familiar o ser querido esté al pendiente de su cuidado y lo acompañe durante todo el proceso. Usted junto con el encargado de su cuidado requerirán también contar con un medio de transporte confiable para ir y venir del centro de atención. El equipo de profesionales en trasplantes le mantendrá bajo observación minuciosa para detectar cualquier complicación, por lo que espere tener que acudir a la clínica todos los días durante algunas semanas. Puede que aún requiera internarse en el hospital si su situación cambia o si comienza a tener complicaciones.

Para reducir el riesgo de infección durante el tratamiento, a los pacientes hospitalizados se les coloca en una habitación privada y equipada con filtros de aire especiales. La habitación también puede tener una barrera protectora para separarla de las demás habitaciones y pasillos. Algunas habitaciones cuentan con un sistema de presión de aire para garantizar que no haya ingreso a la habitación de aire impuro desde el exterior. Si usted va a recibir el tratamiento de forma ambulatoria, recibirá instrucciones sobre cómo evitar infecciones. Por lo general, las personas que se someten a un trasplante están en una parte especial y separada del hospital para evitar tantos gérmenes como sea posible.

La experiencia del trasplante puede resultar abrumadora. Su equipo de profesionales médicos para el trasplante estará disponible para ayudarle con el aspecto físico y emocional durante el proceso, y para que hablen sobre sus necesidades. Se hará todo esfuerzo por responder a sus preguntas para que usted y su familia entiendan por completo lo que se estará haciendo a medida que se esté realizando el trasplante.

Es importante que usted y su familia sepan lo que pueden esperar, pues una vez comenzado el procedimiento del trasplante (refiérase a la próxima sección), este no se puede detener, ya que pueden ocurrir problemas graves como resultado de interrumpir un trasplante en curso.

Un trasplante requiere un compromiso serio de usted y su cuidador y su familia, por lo que es importante saber exactamente qué esperar.

Tratamiento de acondicionamiento (quimioterapia y/o radioterapia)

El acondicionamiento, también conocido como tratamiento previo al trasplante, preparación de la médula ósea o mieloablación, es generalmente un tratamiento con altas dosis de quimioterapia y/o radioterapia. Es el primer paso en el proceso del trasplante y comúnmente toma de una a dos semanas. Esto se realiza por una o más de estas razones:

  • Para hacer espacio en la médula ósea para las células madre trasplantadas
  • Para suprimir el sistema inmunitario del paciente para reducir la probabilidad de rechazo del injerto
  • Para destruir cualquier célula cancerosa restante en el cuerpo del paciente

El tratamiento de acondicionamiento es distinto para cada trasplante. Su tratamiento individual estará planificado en función del tipo de cáncer que padezca, el tipo de trasplante y los tratamientos con quimioterapia o radioterapia que haya recibido previamente.

Si la quimioterapia forma parte de su plan de tratamiento, esta se administrará a través de un catéter intravenoso central y/o mediante pastillas. Si se planifica la radioterapia, esta se administra a todo el cuerpo (lo que se conoce como irradiación corporal total o TBI, en inglés). La TBI puede ser administrada en una sola sesión de tratamiento, o dividirse en dosis durante varios días.

Esta etapa del trasplante puede ser muy incómoda debido a que se emplean dosis muy elevadas de tratamiento. Los efectos secundarios de la quimioterapia y de la radioterapia pueden hacer que usted se sienta muy enfermo, y la recuperación total puede tomarle meses. Un problema muy común son las úlceras en la boca que requieren tratarse con medicamentos potentes contra el dolor. Puede que también presente náuseas, vómitos, imposibilidad para comer, caída del cabello, y tenga problemas pulmonares o dificultades para respirar.

El acondicionamiento también puede causar menopausia prematura en mujeres, así como infertilidad (imposibilidad de tener hijos) tanto en hombres como en mujeres. (Consulte «El trasplante de células madre y la capacidad de tener hijos» en Efectos secundarios del trasplante de células madre).

Infusión de células madre

Después del tratamiento de acondicionamiento, se dan varios días de reposo antes de recibir las células madre. Estas células se suministrarán a través de un catéter venoso central, muy similar a una transfusión sanguínea. Si las células madre fueron congeladas, podría ser que se administren otros medicamentos antes de que se suministren las células madre. Estos medicamentos se usan para ayudar a reducir su riesgo de tener reacción a alguno de los medicamentos conservadores que se aplican a las células congeladas.

Si las células madre fueron congeladas, estas se descongelan en agua tibia y luego son suministradas inmediatamente. Tal vez haya más de una bolsa de células madre. Para los alotrasplantes e isotrasplantes, las células del donante pueden recolectarse (extraerse) en una sala de operaciones (quirófano) y procesarse luego en el laboratorio de inmediato. Una vez que las células están listas, se traen del laboratorio y se infunden (suministran) al paciente; no están congeladas. La cantidad de tiempo requerida para extraer todas las células madre de la solución dependerá de la cantidad de líquido en el que se encuentren.

Durante este proceso, usted estará despierto y no sentirá dolor. Este es un gran paso y a menudo tiene un gran significado para los pacientes y sus familias. A menudo, muchas personas consideran esto como un segundo nacimiento o una segunda oportunidad que la vida les da. Puede que muchos festejen este día como su verdadero cumpleaños.

Efectos secundarios de la infusión

Los efectos secundarios de la infusión son poco comunes y generalmente leves. El agente conservador que se usa al congelar las células madre causa muchos de los efectos secundarios. Por ejemplo, podría tener un fuerte sabor en la boca semejante a ajo o crema de maíz. El chupar caramelos o sorber bebidas con sabor durante y después de la infusión puede ayudar a disimular el sabor. Su cuerpo desprenderá un olor similar. Puede que este olor sea molesto para las personas a su alrededor, aunque usted no lo note. Puede que el olor, junto con el sabor perdure por unos días, pero gradualmente desaparecerán. Por lo general, tener naranjas cortadas en la habitación hace que el olor disminuya. Los pacientes que reciben trasplantes de células madre que no fueron congeladas no presentan este problema porque las células no se mezclan con el agente conservador.

Otros efectos secundarios que podría tener durante e inmediatamente después de la infusión de células madre son:

  • Fiebre o escalofríos
  • Dificultad para respirar
  • Ronchas
  • Presión en el pecho
  • Presión arterial baja
  • Tos
  • Dolor en el pecho
  • Menos cantidad de orina
  • Debilidad

Como se mencionó anteriormente, los efectos secundarios de la infusión son escasamente frecuentes y generalmente leves. Si ocurren, son tratados conforme sea necesario. Siempre se debe finalizar la infusión de células madre.

Recuperación tras la infusión

La etapa de recuperación comienza después de la infusión de células madre. Durante este periodo, usted y su familia esperan a que las células se injerten o «asienten», después de lo cual comienzan a multiplicarse y a producir nuevas células sanguíneas. El tiempo necesario para comenzar a ver una normalización constante de los niveles sanguíneos varía dependiendo del paciente y del tipo de trasplante, pero generalmente toma de 2 a 6 semanas. Usted permanecerá en el hospital o habrá que acudir al centro de trasplantes diariamente durante varias semanas.

Durante las primeras dos semanas, tendrá pocos glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Justo después del trasplante, cuando los recuentos son más bajos, puede que le administren antibióticos para evitar que contraiga infecciones. Puede que le administren una combinación de medicamentos antibacterianos, antimicóticos y antivirales. Estos por lo general se administran hasta que sus recuentos de glóbulos blancos alcanzan cierto nivel. No obstante, puede que se desarrollen complicaciones como infecciones debido a que hay muy pocos glóbulos blancos (neutropenia), o sangrados debido a que hay muy pocas plaquetas (trombocitopenia). Muchos pacientes experimentan fiebres elevadas y requieren de antibióticos intravenosos usados contra infecciones graves. Las transfusiones de glóbulos rojos y plaquetas a menudo son necesarias hasta que la médula ósea empieza a funcionar y las células madre trasplantadas producen células sanguíneas nuevas.

Salvo por la enfermedad de injerto-contra-huésped, que ocurre solamente con los alotrasplantes, los efectos secundarios de los autotrasplantes, los alotrasplantes y los isotrasplantes son similares. Los problemas pueden incluir trastornos estomacales y problemas del corazón, los pulmones, el hígado o los riñones. (Consulte Efectos secundarios del trasplante de células madre para más detalles). Podría ser que también tenga sentimientos de angustia, ansiedad, depresión, júbilo o enojo. La adaptación emocional después de suministrar las células madre puede ser difícil debido a la cantidad de tiempo que se siente mal y aislado de los demás.

Durante este tiempo, puede sentirse en un remolino emocional. El apoyo y el ánimo de familiares y amigos, así como del equipo a cargo de hacer el trasplante es muy importante para sobrellevar los retos de dicho procedimiento.

Alta del hospital después del trasplante

El proceso de recibir la orden de alta realmente comienza semanas antes de su trasplante. El mismo comienza con las instrucciones del equipo de trasplante tanto para usted como para la persona a cargo de su cuidado (encargado principal) sobre:

  • Las precauciones que necesitará tomar
  • Quién será el encargado principal de su cuidado y las actividades que dicha función implicará, y quién sustituirá al encargado principal en caso de que se enfermara y no pudiera estar cerca de usted
  • Cómo preparar su casa
  • Cómo ocuparse del catéter venoso central
  • Cómo mantener el buen cuidado de su boca y dientes
  • Cuáles son los alimentos que debería y los que no debería comer
  • Las actividades que puede y no puede hacer
  • Cuándo llamar al equipo de trasplante o a otros proveedores de atención médica

¿Qué es lo que hay que hacer antes de poder volver a casa?

En su mayoría, los centros de trasplante no dan de alta a los pacientes hasta que éstos cumplan con los siguientes criterios:

  • No tiene fiebre durante 48 horas
  • Puede tomar y retener las píldoras u otros medicamentos por 48 horas
  • Sus náuseas, vómitos o diarrea pueden controlarse con medicamentos
  • Su recuento de neutrófilos (recuento absoluto de neutrófilos o ANC) es de 500 a 1,000/mm³ por lo menos
  • El recuento de hematocritos es de al menos 25% a 30%
  • Tienen un recuento de plaquetas de por lo menos 15,000 a 20,000/mm³
  • Cuentan con alguien que le ayude en casa, así como con un ambiente propicio para la recuperación

(Consulte Cómo se utilizan los trasplantes de células madre y médula ósea para tratar el cáncer para más información sobre neutrófilos, plaquetas y hematocrito).

Si usted no cumple con todos estos requisitos, pero ya no requiere el cuidado intensivo de la unidad de trasplantes, puede que sea transferidos a otra unidad oncológica. Al volver a casa, dependiendo de su estado, puede que requiera permanecer cerca del centro de trasplantes durante algún tiempo.

Rehabilitación después del trasplante de células madre

El proceso de trasplante de células madre no termina cuando se va a casa. Se sentirá cansado y algunas personas presentarán problemas físicos o de salud mental durante la etapa de rehabilitación. Es probable que todavía esté tomando muchos medicamentos. Estas necesidades continuas necesitan ser manejadas ahora en el hogar, de modo que es muy importante el apoyo de la persona que cuida del paciente, así como el de los amigos y la familia.

Los pacientes de trasplante tienen que llevar a cabo un seguimiento cuidadoso durante el periodo de rehabilitación. Podría necesitar hacerse exámenes diarios o semanales, como análisis de sangre, y probablemente también otras pruebas. Durante la rehabilitación inicial, puede que también necesite transfusiones de sangre y plaquetas, antibióticos u otros tratamientos. Al principio necesitará acudir frecuentemente a citas con su equipo de trasplante, posiblemente a diario, pero progresará hasta tener visitas menos frecuentes si las cosas marchan bien. Puede tomar de seis a doce meses, o incluso más, hasta que los recuentos de sangre se normalicen y el sistema inmunitario funcione adecuadamente. Durante este tiempo, su equipo aún le dará seguimiento minucioso.

Algunos problemas pueden surgir hasta un año o más después de la infusión de células madre. Algunos de estos efectos secundarios son:

  • Enfermedad de injerto-contra-huésped (en alotrasplantes)
  • Infecciones
  • Problemas pulmonares como neumonía o inflamación que dificulta la respiración
  • Problemas renales, hepáticos o cardíacos
  • Baja función tiroidea
  • Cansancio abrumador (fatiga)
  • Capacidad limitada para hacer ejercicios
  • Retardo en el crecimiento y el desarrollo de los niños
  • Cataratas
  • Problemas reproductivos o sexuales, como infertilidad, menopausia precoz, dolor o malestar durante las relaciones sexuales, pérdida de interés en tener sexo
  • Surgimiento de nuevos cánceres a causa del trasplante

Asimismo pueden presentarse otros problemas, tales como:

  • Pérdida de la memoria, dificultad para concentrarse
  • Angustia emocional, depresión, cambios en la imagen corporal, ansiedad
  • Aislamiento social
  • Cambios en las relaciones personales
  • Cambios en el significado de la vida
  • Sentimiento de deuda para con los demás
  • Problemas de empleo y seguro médico

Aunque el trasplante haya ocurrido hace algunos meses, su equipo de trasplante está disponible para apoyarle. Es importante que informe sobre cualquier problema que esté teniendo, ya que pueden ayudarle a recibir el apoyo que necesita para controlar los cambios que está presentando. También pueden ayudarle a saber si los problemas son graves, o constituyen una parte normal de la recuperación. El National Bone Marrow Transplant Link ayuda a los pacientes, a las personas a cargo de su cuidado, y a las familias proporcionando información importante y servicios de apoyo antes, durante, y después del trasplante. Puede contactarlos llamando al 1-800-LINK-BMT (1-800-546-5268) o en línea en www.nbmtlink.org.

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