En pocas palabras, el pH es un término químico utilizado para expresar la ionización del hidrógeno en el agua. El término se refiere al hidrógeno potencial e indica la descomposición del agua (H2O), normalmente una molécula estable, en un ion hidrógeno cargado positivamente y una molécula de hidrógeno-oxígeno (HO) cargada negativamente.
La acidez o alcalinidad del suelo viene determinada por esta ionización. Se produce cuando los distintos minerales y materiales orgánicos se combinan con las moléculas de agua obligando al suelo a cambiar sus propiedades.
Luster Leaf 1817 Rapitest Mini Soil pH/Moisture Tester
Medimos esta ionización en una escala de 0 a 14. Se dice que los suelos neutros tienen un pH de 7, es decir, a mitad de la escala. Los suelos ácidos son los que tienen un pH inferior a 7, y los alcalinos son los que tienen un pH superior a 7.
Los suelos con un pH extremadamente bajo -suelos muy ácidos- se denominan agrios. Por el contrario, se dice que los suelos con un pH alto son dulces.
Hasta aquí la jerga científica. Lo importante para usted es saber que el pH afecta directamente a la salud de sus suelos. Y la salud de su suelo, a su vez, afecta directamente a la salud de sus plantas. Y por último, la salud de sus plantas afecta directamente a su susceptibilidad a las enfermedades y a los insectos, lo que puede requerir la aplicación de pesticidas que, a su vez, pueden afectar directamente a su salud y al medio ambiente.
La mayoría de las plantas no toleran un suelo con un pH extremo. La razón de esta intolerancia es que el pH afecta a la liberación de elementos esenciales necesarios para el crecimiento y la vitalidad de la planta.
El nitrógeno (símbolo químico N) es el elemento del que más se habla. Es el elemento principal que afecta a la productividad de la vida vegetal. Es decir, es el responsable directo del crecimiento vegetativo de las plantas. Sin nitrógeno, las hojas de las plantas carecen de su exuberante color verde y el crecimiento se ve frenado. En suelos con un pH muy bajo o muy alto, el nitrógeno queda atrapado, una condición que la mayoría de las plantas no pueden tolerar.
El fósforo (P) es esencial para unas raíces fuertes, el desarrollo de las flores y los frutos y la resistencia a las enfermedades. También puede quedar atrapado en los suelos que están excesivamente fuera de la neutralidad del pH. Pruebas recientes han demostrado que muchos suelos tienen cantidades excesivas de fósforo que se ha acumulado por la aplicación excesiva de fertilizantes sintéticos en suelos arcillosos apretados. Una de las razones de esta acumulación es que estos suelos de pH normalmente alto impiden a la planta utilizar todo el fósforo que está disponible.
El potasio (K) es el tercer elemento importante para la salud del suelo. La mayoría de las veces, las plantas utilizan la forma de potasio conocida como potasa u óxido de potasio (K2O). El potasio es esencial para la capacidad de la planta de crear azúcares. También es esencial para la capacidad de las plantas de resistir a las enfermedades, sobrevivir a las temperaturas frías y proporcionar protección contra la sequía. Es menos susceptible a las variaciones del pH del suelo, pero puede quedar significativamente atrapado cuando los suelos están en sus extremos de alcalinidad o acidez.