Una de mis primeras (y favoritas) pacientes me llamó hace tres semanas. Se había sometido a su mamografía anual en mayo, que fue muy dolorosa, y notó una disminución posterior en el tamaño de su seno izquierdo. Le pedí que viniera a verme y, efectivamente, su pecho izquierdo era significativamente más pequeño que el derecho. Le había realizado un aumento de pecho en 2002 con implantes mamarios de solución salina, cuando los implantes de silicona aún no estaban en el mercado. Hasta ahora no había tenido ningún problema. ¿Ahora qué?
Cualquier implante mamario puede romperse; se trata de un dispositivo médico fabricado por el hombre que se desgasta con el tiempo. Normalmente, la cubierta de un implante empieza a perder su integridad después de 10 años. En muchos casos, el implante permanecerá intacto. Sin embargo, si se produce un traumatismo repentino en un implante mamario envejecido, como durante una mamografía o un accidente de coche, esto puede provocar la rotura del implante. Cuando un implante de solución salina se rompe, la paciente suele notar una disminución del tamaño del pecho. El líquido salino se escapa y es absorbido por el cuerpo. Sin embargo, una rotura de silicona es un poco más difícil de detectar. Como el líquido es mucho más espeso y cohesivo, permanece dentro de la bolsa creada para el implante. En algunos casos, la paciente puede no notar la rotura en absoluto. En otros casos, puede tener dolor, enrojecimiento de la mama o notar un sutil cambio en la forma del pecho. Por este motivo, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) recomienda la realización de resonancias magnéticas periódicas a las pacientes con implantes mamarios de silicona.
En el caso de mi paciente, el diagnóstico era sencillo; tenía implantes de solución salina de 10 años de antigüedad, había sufrido un traumatismo en la mama y había sufrido un cambio posterior en su tamaño. Si su historia hubiera sido menos clara, o su examen menos notable, la habría mandado a hacer una ecografía, que es una forma barata y rápida de examinar la integridad de un implante mamario. No ofrece toda la información que puede proporcionar una resonancia magnética, pero es un excelente primer paso. Si la ecografía es equívoca, la siguiente prueba que solicito es una resonancia magnética. Desgraciadamente, no todas las compañías de seguros cubren el elevado coste de una resonancia magnética después de un aumento mamario, por lo que generalmente las solicito sólo si es absolutamente necesario.
Una vez que hemos determinado que un implante está roto, ¿hay que operar? Siempre recomiendo a los pacientes que retiren un implante roto, por varias razones. En primer lugar, se trata de un dispositivo médico defectuoso, y si no está cumpliendo su función, debe retirarse. En segundo lugar, la inflamación asociada a la rotura del implante puede causar síntomas, como dolor, enrojecimiento y cambios secundarios al tejido cicatricial. El tejido cicatricial en la mama, también conocido como contractura capsular, es el máximo enemigo del cirujano plástico; puede empeorar con el tiempo si no se trata, puede asociarse a dolor y puede causar deformidades irreversibles en la mama. Por estas razones, aconsejo a las pacientes que se les retire el dispositivo defectuoso. Se pueden sustituir nuevos implantes al mismo tiempo, o la paciente puede optar por vivir sin sus implantes.
La buena noticia es que la actual generación de implantes de silicona es extremadamente duradera. (A mi hijo de tres años le gusta saltar sobre mis muestras de implantes en la consulta, y todavía no ha roto ninguno. Esta debe ser la mejor prueba disponible de la resistencia de los implantes. Y no, no sé qué le incita a hacerlo). Además, los tres principales fabricantes de implantes de Estados Unidos ofrecen garantías de por vida en sus implantes. Si su implante de silicona se rompe, en cualquier momento, lo sustituirán gratuitamente, y proporcionarán financiación para ayudar con los honorarios quirúrgicos asociados.
Mi paciente se sometió a una cirugía el viernes pasado conmigo, para la eliminación de sus viejos implantes de solución salina y la sustitución por nuevos implantes de silicona, ligeramente más grandes. Se ve muy bien, se siente mucho mejor, y puede volver a lo realmente importante en su vida, su maravillosa familia.