El enfoque del Fondo Mundial para la Mujer se centra en conseguir derechos para las mujeres, las niñas y todas las personas históricamente marginadas. Los derechos humanos de las mujeres son esenciales para lograr la justicia de género a nivel mundial. Conozca más sobre la justicia de género aquí.
¿Qué son los derechos humanos de las mujeres?
Los derechos de las mujeres son los derechos humanos fundamentales que fueron consagrados por las Naciones Unidas para todos los seres humanos del planeta hace casi 70 años. Estos derechos incluyen el derecho a vivir libre de violencia, esclavitud y discriminación; a recibir educación; a tener propiedades; a votar; y a ganar un salario justo y equitativo.
Como dice el ya famoso dicho, «los derechos de las mujeres son derechos humanos». Es decir, las mujeres tienen todos estos derechos. Sin embargo, en casi todo el mundo, a las mujeres y a las niñas se les siguen negando, a menudo simplemente por su género.
Ganar derechos para las mujeres es algo más que dar oportunidades a cualquier mujer o niña individualmente; se trata también de cambiar el funcionamiento de los países y las comunidades. Implica cambiar las leyes y las políticas, ganar los corazones y las mentes, e invertir en organizaciones y movimientos de mujeres fuertes.
El Fondo Mundial para la Mujer existe para apoyar los incansables y valientes esfuerzos de los grupos de mujeres que trabajan cada día para ganar derechos para las mujeres y las niñas. Estos grupos trabajan para garantizar que las mujeres puedan tener propiedades, votar, presentarse a las elecciones, recibir un salario justo y vivir libres de violencia, incluida la violencia doméstica, las agresiones sexuales y las prácticas nocivas como la mutilación genital femenina.
¿Qué derechos defendemos?
Queremos que todas las mujeres y niñas disfruten de los derechos consagrados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. También defendemos otros derechos que son vitales para la igualdad de las mujeres. Defendemos el derecho de la mujer a decidir si tiene hijos y cuándo los tiene, y a tener una atención sanitaria de calidad que le permita no morir durante el embarazo o el parto. Sabemos que la mutilación genital femenina es una violación de los derechos de las niñas y debe ser eliminada. Y defendemos el derecho de toda mujer a vivir en igualdad de condiciones y libre de discriminación, independientemente de su sexualidad o identidad.
Apoyamos dos documentos fundamentales para los derechos de la mujer que han seguido a la declaración de la ONU. La Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), una declaración internacional de derechos de la mujer, exige a los gobiernos que pongan fin a la discriminación de género y afirma el derecho de la mujer a los servicios sanitarios, incluida la planificación familiar. La Declaración y la Plataforma de Acción de Pekín, adoptadas en 1995 en la Cuarta Conferencia Mundial de la ONU celebrada en Pekín, fueron un grito de guerra para integrar la igualdad de género y los derechos de la mujer en todas las facetas de la vida.
Los derechos de la mujer y los Objetivos Mundiales
Los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU establecieron metas específicas para reducir la pobreza, incluyendo objetivos para aumentar la igualdad de género en la educación, el trabajo y la representación. ONU Mujeres constató que los progresos eran desiguales. A nivel mundial, hay más mujeres que asisten a la escuela y trabajan. Sin embargo, las niñas siguen teniendo más probabilidades que los niños de no asistir a la escuela (especialmente en el nivel secundario). Y aunque el número de mujeres en cargos electos ha aumentado, siguen siendo sólo el 21,8% de los parlamentarios. Además, los derechos de las mujeres siguen estando en peligro en muchos ámbitos que no se abordan en los objetivos del milenio, desde la violencia contra las mujeres hasta los derechos sexuales y reproductivos. Y las mujeres que ya están marginadas por su raza, casta, sexualidad, ingresos o ubicación son las que menos beneficios obtienen.
Los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son realmente prometedores para integrar los avances en los derechos de las mujeres, e incluyen un objetivo específico (Objetivo 5) para la igualdad de género. El Objetivo 5 tiene una base más amplia que el último objetivo de género e incluye metas para acabar con la violencia de género, eliminar el matrimonio infantil y la mutilación genital femenina, y garantizar el acceso a la salud sexual y reproductiva. También incluye la igualdad de acceso a la educación, la ampliación de las oportunidades económicas de las mujeres y la reducción de la carga del trabajo de cuidados no remunerado para las mujeres y las niñas. Ahora nos corresponde a todos nosotros hacer que los gobiernos se responsabilicen de sus compromisos y garantizar que los objetivos se cumplan. La participación de las mujeres -y la financiación de las soluciones de los grupos de mujeres de base- serán fundamentales para el éxito.
¿Cómo es el futuro de los derechos de las mujeres?
El futuro de los derechos de las mujeres en el mundo está en juego. Los recortes propuestos por la administración estadounidense a la ayuda exterior y las políticas estrictas -desde el aborto y el reasentamiento de refugiados hasta el cambio climático- suponen una amenaza directa para la salud, la dignidad y el bienestar de las mujeres y las niñas de todo el mundo. Debemos reflexionar: ¿Perderán las mujeres de todo el mundo los derechos que tanto les ha costado conseguir o, por el contrario, la reacción catalizará nuevas victorias?
Este momento exige dinamizar nuevos esfuerzos y centrarse en el fortalecimiento de los movimientos de mujeres para que ayuden a liderar la carga del cambio social en las cuestiones más apremiantes de nuestro tiempo. El Fondo Mundial para la Mujer se ha comprometido a convertir estos retos en oportunidades para que las mujeres hagan valer su liderazgo, su acción y su voz. Para 2020, el Fondo Mundial para la Mujer se asegurará de que los movimientos en favor de los derechos de la mujer sean poderosos, influyentes y consigan logros duraderos. Ahora es el momento de apoyar al movimiento mundial de las mujeres.
El Fondo Mundial para la Mujer trabaja por un mundo en el que todas las mujeres y niñas puedan ejercer y disfrutar de sus derechos humanos.
Sólo cuando las mujeres y las niñas tengan pleno acceso a sus derechos -desde la igualdad salarial y los derechos de propiedad de la tierra hasta los derechos sexuales, la ausencia de violencia, el acceso a la educación y los derechos de salud materna- existirá una verdadera igualdad. Sólo cuando las mujeres hayan asumido funciones de liderazgo y pacificación y tengan una voz política igualitaria se transformarán las economías y los países. Y sólo entonces todas las mujeres y niñas tendrán la autodeterminación a la que tienen derecho.