Costumbres y cocina de Senegal
La cocina de Senegal ha recibido la influencia de naciones como Francia, Portugal y las del norte de África, y también de muchos grupos étnicos, el mayor de los cuales es el wolof; el Islam, que penetró por primera vez en la región en el siglo XI; y varias culturas europeas, especialmente la francesa, que mantuvo el país como colonia hasta 1960. De hecho, el francés es el idioma oficial, seguido del wolof, la principal lengua autóctona.
Debido a que Senegal limita con el océano Atlántico, el pescado es muy importante. El pollo, el cordero, los guisantes, los huevos y la carne de vacuno también se utilizan en la cocina senegalesa, pero no el cerdo, debido a la población mayoritariamente musulmana del país. En el interior semiárido, el cacahuete y el mijo son los principales cultivos, así como el cuscús, el arroz blanco, los boniatos, las lentejas, los guisantes de ojo negro y diversas verduras. Las carnes y verduras se suelen guisar o marinar con hierbas y especias y luego se vierten sobre el arroz o el cuscús, o simplemente se comen con pan. En todo el país, las comidas tienden a ser de un solo plato, y todo el mundo se sirve de un cuenco o bandeja, utilizando cucharas o las manos desnudas para recoger la carne y las verduras, siempre complementadas con arroz o cuscús. El sosa kaani, una salsa incendiaria elaborada con pimientos escoceses, está presente en todas las mesas y en todas las comidas.
Hay tres platos principales muy conocidos y apreciados en Senegal. La thiéboudienne ha sido calificada como el plato nacional del país. Es una especialidad de pescado y arroz que se originó en la antigua capital colonial francesa de Saint-Louis. Requiere una preparación elaborada, por lo que no es un plato cotidiano. Otra comida muy popular es la Yassa, que puede ser pollo o pescado que se marina toda la noche con limón y cebolla, se cuece a fuego lento y se sirve sobre arroz. Y, por último, el Mafe es un guiso que suele hacerse con carne de vaca o cordero en una salsa de tomate y cacahuetes.
Los postres son muy ricos y dulces, y combinan ingredientes autóctonos con la extravagancia y el estilo característicos del impacto francés en los métodos culinarios de Senegal. Suelen servirse con fruta fresca y tradicionalmente van seguidos de café o té.
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Etiqueta en la cena:
Los modales en la mesa senegalesa pueden ser algo formales. Debe esperar a que le muestren su asiento. Los asientos suelen ser una cuestión de jerarquía. Antes de que se sirva la comida, se sacará una palangana para que los comensales se laven las manos. Las mujeres y los hombres pueden comer en mesas separadas en la misma habitación o pueden comer en habitaciones separadas.
Si la comida se sirve en el suelo o en una mesa baja, siéntese con las piernas cruzadas e intente que sus pies no toquen el tapete de la comida. No comience a comer hasta que lo haga el mayor de los varones. La comida suele servirse en un cuenco común. Debes comer de la parte del cuenco que tienes delante. No hay que pasar la mano por el cuenco para coger algo del otro lado. Come sólo con la mano derecha. Es de esperar que se le inste a tomar una segunda ración. Pruebe cada plato. Dejar un poco de comida en el plato o en la parte del cuenco común indica que has sido atendido. La gente suele quedarse media hora o más después de comer para seguir construyendo la relación personal.
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