Los cleavers (Galium aparine) son plantas anuales tenaces que crecen en densas matas en praderas margosas y ricas en nitrógeno, bosques, matorrales y a lo largo de las costas de los climas templados de Europa, el norte de África, Asia y Norteamérica. Con su tallo de forma cuadrada y sus pelos pegajosos, se las arreglan para pegarse a todo lo que pasa a su lado, lo que les ha valido apodos memorables como «planta de velcro», «hierba de agarre» y «hierba atrapada». De hecho, los cleavers se ganaron su nombre de la palabra en inglés antiguo «to cleave», que significa «agarrarse». La planta forma hojas de ocho en espiral, o verticilos, y diminutas flores blancas. Aquí, en California, aparecen en multitud en primavera. Aunque es fácil ignorarlas al pasar por delante de ellas, no dejarán que las olvide una vez que se adhieran a la pierna de su pantalón.
El atractivo primaveral de las cuchillas ha sobrevivido desde la época de los antiguos, cuando los curanderos alababan las cuchillas por su capacidad para aliviar la retención temporal de agua. Destacados romanos, como el médico Galeno y el filósofo Plinio el Viejo, las elogiaban por su capacidad para aliviar el aumento temporal del peso del agua, mientras que el médico griego Dioscórides las utilizaba para ayudar a cuajar y filtrar la leche, una tradición que, al parecer, sigue viva en Suecia. Muchas tribus nativas americanas las utilizaban para promover la salud de los riñones. Por razones terapéuticas, los herbolarios contemporáneos utilizan las cuchillas de la misma manera. Desde el punto de vista energético, a los herbolarios populares también les gusta utilizar las escarolas como hierba refrescante para ayudar a eliminar el calor y el estancamiento y aumentar el flujo.
Al hacer la transición estacional del invierno a la primavera, la energía de las escarolas puede ser una fuerza útil para estimular el sistema linfático. A veces llamado «el callejón trasero» del sistema circulatorio, el sistema linfático ayuda a eliminar los productos de desecho del torrente sanguíneo y a mantener el sistema inmunológico. Tomando hierbas como la escalfa, podemos ayudar a la desintoxicación natural del sistema linfático para que vuelva a fluir.
Ya sea que exprimas tus propias escalfas o las experimentes en nuestros tés Weightless® Cranberry o EveryDay Detox® Lemon, te animamos a conocer esta pequeña y poderosa hierba. Lo más probable es que te enganches a sus beneficios tan rápido como ellos a ti. Y una cosa es segura: ¡las cuchillas no se rinden fácilmente!