Tras el verano más caluroso que ha vivido el hemisferio norte, investigadores de la ONU que buscan en los registros climáticos han hecho un descubrimiento escalofriante: El 22 de diciembre de 1991, una remota estación meteorológica situada en la cima de la capa de hielo de Groenlandia registró una temperatura de menos 93,3 grados Fahrenheit (menos 69,6 grados Celsius), la temperatura más fría jamás registrada en el hemisferio norte. 23) en un comunicado de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) de la ONU, hace temblar el récord anterior de menos 90,4 F (menos 67,8 C) establecido en dos ciudades diferentes del Ártico siberiano, la primera en 1892 y la otra en 1933. A modo de comparación, los tres mínimos extremos superan la temperatura media de Marte, que es de aproximadamente -81 F (-63 C), según la NASA.
«En la era del cambio climático… este récord de frío recién reconocido es un importante recordatorio sobre los marcados contrastes que existen en este planeta», dijo el secretario general de la OMM, Petteri Taalas, en el comunicado.
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En contraste con esas bajas, por supuesto, están las altas extremas que siguen estableciendo nuevos récords abrasadores año tras año, gracias al calentamiento global. En Verkhoyansk, por ejemplo, una de las ciudades siberianas que fue testigo del anterior récord de temperaturas mínimas en 1892, las temperaturas alcanzaron los 100 F (38 C) este mes de junio por primera vez en la historia, estableciendo un nuevo récord de temperatura para el Círculo Polar Ártico.
Mientras tanto, la Antártida, que todavía tiene el récord mundial de temperatura más fría en la Tierra (menos 128.Por otro lado, la Antártida, que sigue ostentando el récord mundial de temperatura más fría de la Tierra (-128,6 F, o -89,2 C, registrada en 1983), registró un nuevo máximo histórico este mes de febrero, cuando las temperaturas alcanzaron los 20,75 C durante el verano del hemisferio sur.
El nuevo récord de temperatura más baja de Groenlandia fue descubierto por un equipo de los llamados «detectives del clima» que trabajan en el Archivo de Extremos Meteorológicos y Climáticos de la OMM en Ginebra. La temperatura fue registrada por la estación meteorológica automática de Klinck, que estuvo activa de 1990 a 1992 cerca del pico más alto de la capa de hielo de Groenlandia, según AP News. Los detectives de la OMM confirmaron estos resultados con los investigadores originales de Klinck antes de hacer su anuncio el miércoles. Creado en 2007, el Archivo de la OMM ha descubierto una serie de registros meteorológicos similares a lo largo de los años. En junio de 2020, los investigadores del Archivo anunciaron el descubrimiento del rayo más largo jamás registrado: un rayo de 440 millas de largo (700 kilómetros) que se extendió por Brasil y Argentina en Halloween de 2018. Qué puede ser más espeluznante que eso?
Publicado originalmente en Live Science.
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