Las chaperonas son un grupo de proteínas funcionalmente relacionadas que ayudan al plegamiento de las proteínas en la célula en condiciones fisiológicas y de estrés. Comparten la capacidad de reconocer y unirse a proteínas no nativas, evitando así la agregación inespecífica. Los principios funcionales subyacentes de las diferentes clases de chaperonas están empezando a comprenderse. Un rasgo destacado de las chaperonas moleculares es la participación de reacciones dependientes de la energía en el proceso de plegado. La unión de nucleótidos a las chaperonas dependientes de ATP (por ejemplo, GroEL, Hsp70, Hsp90) conduce a veces a grandes cambios conformacionales en la chaperona que permiten pasar de un estado de alta a uno de baja afinidad por las proteínas sustrato. Curiosamente, la actividad ATPasa, que es el determinante clave de los ciclos funcionales, está estrechamente regulada por un conjunto de co-chaperonas. Mientras que en el caso de las chaperonas dependientes de ATP los sitios de unión para el nucleótido y la proteína se encuentran en una sola proteína, en el caso de las chaperonas independientes de ATP (por ejemplo, sHsps, SecB) el paso dependiente de la energía lo realiza otra chaperona (Hsp70, SecA). Por lo tanto, las chaperonas independientes del ATP pueden considerarse componentes de «retención» eficientes. La cooperación de diferentes maquinarias de chaperonas crea una red sinérgica de ayudantes de plegado en la célula, que permite mantener la homeostasis de las proteínas en condiciones no permisivas para el plegado espontáneo.