Mi día se divide en 19 «períodos» con 19 «temas» diferentes que van de 25 a 90 minutos. Me permito 5 minutos entre cada categoría para permitir que mi mente se recupere, lo cual es primordial para no sobrecargarse de trabajo ni estresarse en exceso.
He dedicado tiempo a la aptitud física, al crecimiento y desarrollo personal, a comer mientras aprendo, a la relajación, al descanso, a las relaciones y al entretenimiento.
Todas estas son características de cuando prosperaba más durante mis días en la escuela secundaria. Reservé tiempo personal para la creatividad y la creación de pensamientos, lo que me proporcionó la combinación adecuada de control y libertad.
Esta es la metodología clave, el porqué, la semilla que hace crecer la planta del horario.
Programa tu día como emprendedor basándote en el momento en que te sientas más productivo, más comprometido y más exitoso.
Una vez que descubras esto, el resto se vuelve mucho más sencillo.
Utilizo 12 horas al día para las tareas relacionadas con el «trabajo» y he estado haciendo esto 6 días a la semana, así que 72 horas a la semana trabajando.
Soy más productivo que nunca.
Soy más eficiente que nunca.
Soy más creativo que nunca.
Soy más enérgico que nunca.
Estoy creando más oportunidades para mi negocio que nunca.
Soy más feliz que nunca.
Los 3 atributos más importantes que he encontrado en la construcción de su día, no importa lo que implica o lo que parece, son la intensidad, la consistencia y la flexibilidad.
Intensidad
Estas son ráfagas cortas o sprints en 19 categorías diferentes. Tanto si tienes 5 minutos asignados a una tarea como si tienes 500 minutos, es mejor que te asegures de que es una dedicación ininterrumpida y enfocada al tema en cuestión.
Programa trozos de tiempo para distracciones como la televisión o los videojuegos, pero no te desvíes del tiempo que tienes para trabajar en lo que tienes que trabajar, y para hacer lo que tienes que hacer.
Este es tu medio de vida, así que hagamos que el tiempo cuente.
Consistencia
Esto no es una cosa de una sola vez. Va a tomar días y semanas para acostumbrarse, para sentirse cómodo, y para formar un hábito. Esto requerirá disciplina, compromiso y repetición que le permitirán memorizarlo en unas pocas semanas.
Pegarse al plan es lo que le permitirá el éxito que desea y merece. Juega con él para empezar y siente lo que es correcto para ti, pero una vez que el período de experimentación ha terminado, cementa este horario en tu cerebro.
Flexibilidad (Flexibilidad Ligera)
Tim Ferriss es un gran fan de esto.
El viejo adagio es cierto y no hay un día particular como empresario. Pero, podemos acercarnos, y esta es la manera de hacerlo.
Las llamadas pueden surgir en diferentes momentos, las reuniones pueden ser programadas, y las oportunidades pueden surgir fuera de sus zonas asignadas, pero asegúrese de ajustarse en consecuencia.
Entérate de que tu horario óptimo no está grabado en piedra.
Pero cuanto más te desvíes, más te acercarás a ese empresario desorganizado, con exceso de trabajo y estresado que no puede explicar el funcionamiento interno de un día en tu vida.