Cómo hacer aceite de cannabis

El aceite de oliva es un producto que muchas personas consumen como parte de su dieta diaria debido a sus muchos beneficios para la salud, pero ¿qué pasa con el aceite de cannabis? El aceite de cannabis no suele figurar en la dieta de mucha gente, sobre todo de aquellos que no consumen cannabis, aunque esto está cambiando poco a poco. Gracias a la reciente ola de legalizaciones en todo el mundo y a las investigaciones que se están llevando a cabo, estamos conociendo más sobre las propiedades del cannabis y sus increíbles beneficios cuando se utiliza correctamente. Por eso hoy te vamos a enseñar a hacer aceite de cannabis.

Todo el mundo debería poder aprovechar las increíbles propiedades del cannabis sin necesidad de fumarlo. Vamos a mostrarte cómo hacer aceite de cannabis. Sus propiedades pueden variar en función del cannabis que se utilice para elaborarlo, que puede ser de predominio de THC o de CBD. De cualquier manera, la receta es la misma.

Vamos a echar un vistazo a estas dos recetas que dan como resultado un delicioso aceite de cannabis casero rico en cannabinoides.

Cómo hacer aceite de cannabis:

Antes de empezar con la receta, tendrás que averiguar el tipo de cannabis que vas a utilizar. Puedes utilizar cannabis rico en THC, rico en CBD o equilibrado para esta receta.

Si buscas hacer un aceite que cualquier persona pueda consumir sin obtener ningún tipo de efecto psicoactivo, debes utilizar cannabis de alto CBD que contenga niveles de THC extremadamente bajos. Deberías utilizar variedades como Sweet Pure CBD de Sweet Seeds o Solodiol de Elite Seeds. Los efectos producidos por las cepas ricas en CBD las hacen perfectas para el consumo diario.

Para aquellos que buscan hacer un aceite de cannabis que tenga todas las propiedades del cannabis, incluyendo las psicoactivas, recomendamos encarecidamente utilizar una cepa con altos niveles de THC o más THC que CBD. Esto permite crear un aceite de cannabis que es capaz de aliviar el dolor muscular intenso, reducir los ataques epilépticos, aumentar el apetito, tratar el insomnio, etc. También es una forma mucho más segura de consumir cannabis ya que no necesitas inhalar ningún humo desagradable.

Ingredientes y materiales:

• 500-700ml de aceite de oliva virgen extra
• 20-25g de cannabis seco y curado
• Un termómetro de cocina
• Una espátula de cocina
• Olla grande (3-5L)
• Una olla pequeña (1L)
• Un molinillo de hierba
• Un filtro de café
• Un colador metálico fino
• Un recipiente de cristal con tapa
• 5L de agua embotellada

Cómo hacer aceite de cannabis | RECETA 1

Esta primera receta es la más fácil de hacer, ya que apenas necesita mucho trabajo y sólo requiere un poco de paciencia.

• 1: Comienza lavando y descargando tu cannabis con el proceso que prefieras. Si quieres un efecto menos psicoactivo y más propiedades medicinales de tu aceite, simplemente lava tu cannabis antes de usarlo y sáltate el proceso de descarbonización (sólo hazlo si no quieres un resultado final psicoactivo).
• 2: Consigue un bol de cristal lo suficientemente grande para la cantidad de aceite que piensas hacer
• 3: Vierte tu aceite de oliva virgen extra preferido en el bol
• 4: Añade 20-25g de cannabis seco y curado (no molido)
• 5: Déjalo macerar en un lugar oscuro y seco durante un par de semanas, mézclalo de vez en cuando para que el cannabis libere completamente sus propiedades
• 6: Después de un par de semanas debería estar listo para consumir
• 7: No remuevas el cannabis
• 8: Si el aceite de cannabis resulta demasiado fuerte, vierte el aceite en una nueva botella de cristal y añade una cuarta parte de aceite de oliva virgen extra para suavizar el efecto. Agítalo bien y déjalo reposar en la oscuridad durante un par de días para que se mezcle correctamente
• 9: Tu aceite de cannabis ya está listo para ser utilizado como complemento alimenticio, en forma de gotas o incluso como crema para la piel

Cómo hacer aceite de cannabis | RECETA 2

Esta segunda receta de aceite de cannabis es un poco más práctica y mucho más rápida. ¡Tendrás que coger tu equipo de cocina y ponerte a ello! El aceite resultante de esta receta es mucho más refinado que el de la primera receta que tratamos.

1- Hierve tu cannabis

Coloca tu hierba en una olla grande y añade suficiente agua para cubrir el cannabis. Cuando empiece a hervir, baja el fuego al mínimo y mantenlo así durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando.

2- Cuela tu cannabis

Después de 10 minutos, tendrás que colar tu cannabis. Vierte tus flores en el colador y deja que el agua escurra sin hacer presión. Repite todo el proceso, volviendo a hervir la hierba, hasta que el agua salga limpia (con 3 veces debería bastar).

3- Sin agua

Una vez que hayas colado tu cannabis tendrás que intentar que pierda la mayor cantidad de agua posible. Para mantener todos sus cannabinoides intactos, recomendamos cubrir una superficie plana con papel de cocina no aromático y colocar tu cannabis encima. Esto permite que el papel de cocina absorba el agua sobrante sin necesidad de presionar tu hierba.

Recuerda: esto se hace para limpiar completamente tu cannabis, eliminando el polvo, los insectos, cualquier producto, la clorofila y los minerales sobrantes. Este proceso es totalmente seguro, ya que la marihuana no se disuelve ni se adhiere al agua y no se pierden cannabinoides.

4- Añade tu aceite de oliva virgen extra

Una vez que tu cannabis esté limpio y se haya extraído todo el agua, tendrás que colocarlo en una olla pequeña y añadir tu aceite de oliva virgen extra.

5- Baño María

Para calentar tu cannabis de la manera correcta para que disuelva todos sus cannabinoides en el aceite, primero tendrás que llenar la olla grande con agua y colocar la olla más pequeña, la que tiene el aceite y el cannabis, flotando en el agua en la olla más grande. Hierve la olla grande.

6- Tiempo al baño María

Una vez que el agua está hirviendo, el proceso de asimilación de los cannabinoides ha comenzado. Este puede ser un proceso bastante lento, que lleva unas horas, aunque es mucho más rápido que la primera receta. Para obtener los mejores resultados posibles, se recomienda continuar este proceso durante dos o tres horas, mezclando de vez en cuando. Para obtener unos resultados perfectos, intente mantener la temperatura a unos 100°C estables. Para ello puedes utilizar un termómetro de cocina.

7- Embotellado

Después del baño María, tendrás que dejar que el líquido se enfríe en su recipiente. Una vez que se haya enfriado deberás colar la mezcla utilizando el filtro de café. Hazlo con un cuidado increíble, asegurándote de que ningún trozo de cannabis pase por el filtro. Tu aceite de cannabis ya está listo!

8- Cómo guardar el aceite de cannabis

Una vez que hayas hecho tu aceite, tendrás que guardarlo en un lugar oscuro y fresco. Esto permite que los cannabinoides se mantengan 100% potentes durante mucho más tiempo. Recomendamos mantener la botella principal en un lugar oscuro y utilizar una pequeña botella de aceite para tu comida.

Cómo tomar el aceite de cannabis

Aceite de cannabis como aderezo para ensaladas

Una de las mejores formas de ingerir el aceite de cannabis es en crudo. Si se utiliza para freír cualquier cosa, pierde todas sus propiedades en cuanto a cannabinoides debido a las altas temperaturas. Se recomienda utilizarlo como aderezo para las ensaladas, asegurándose de probarlo previamente para comprobar su potencia y la cantidad que se debe utilizar.

Aceite de Cannabis para Masajes

Para aquellos que sufren de dolores musculares o de espalda, el aceite de cannabis se puede utilizar como un potente aceite de masaje; tiene muchos efectos relajantes y terapéuticos y se puede utilizar para cualquier tipo de masaje; también se puede utilizar en reflexología. También puedes añadirlo a cualquier crema o aceite de masaje como el de lavanda o el de romero, entre otros.

Aceite de cannabis sublingual

Si quieres usarlo como dosis directa, puedes usarlo sublingual. Simplemente usa un cuentagotas bajo tu lengua y luego deja que se extienda lentamente por tu boca. Esta es una forma mucho más directa y se recomienda para uso medicinal.

Precauciones de seguridad del aceite de cannabis

Antes de empezar a tomar el aceite de cannabis, ya sea de forma ocasional o diaria, tendrás que hacer algunas pruebas para ver su potencia. Se recomienda probar un par de gotas y esperar unas horas para ver si sus efectos son demasiado suaves o duros. Si es demasiado potente puedes añadir ¼ de aceite normal y agitar bien para mezclarlo. Puedes repetir este proceso tanto como sea posible.

Al ingerir aceite de este tipo tendrás que ser extremadamente cauteloso. Tienes que marcar cada botella cuidadosamente – si alguien lo usa accidentalmente en su ensalada, probablemente no tendrá un viaje muy agradable. También tendrás que extremar las precauciones cuando haya niños corriendo por la casa. Si no está etiquetado correctamente y se almacena en un lugar al que los niños puedan acceder, puedes tener una situación bastante mala en tus manos. Mantenga su aceite de cannabis lejos de los niños, etiquetado correctamente y asegúrese de saber dónde está.