La gente se ha preocupado por desodorizar durante muchos miles de años. Las técnicas antiguas incluían cubrirse con olores fuertes, afeitarse el vello de las axilas, ponerse grasa perfumada en la cabeza y utilizar sales naturales.
Los desodorantes son historia antigua
Los egipcios no utilizaban desodorantes como los que utilizamos ahora, sus métodos eran un poco menos convenientes y algunos eran incluso francamente extraños. Tomaban un baño perfumado seguido de la aplicación en la axila de aceites perfumados para cubrir los malos olores. Se descubrió que la eliminación del vello de las axilas disminuía el olor corporal, cuando se combinaba con el lavado frecuente y la aplicación de olores fuertes. Los científicos reconocieron mucho más tarde que el afeitado funcionaba porque limitaba el crecimiento de las bacterias en la zona de las axilas (las bacterias malolientes son la causa del olor corporal). Los egipcios también se ponían grasa perfumada en la cabeza. Al derretirse, la grasa desprendía un agradable aroma.
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Una técnica utilizada en toda Asia era (y sigue siendo) la aplicación de sales minerales en la axila; una técnica extremadamente eficaz que acababa con las bacterias que crecían bajo el brazo y evitaba los malos olores. Estas sales minerales que eliminan los olores corporales son ahora la base de muchos desodorantes naturales modernos, gracias a su larga reputación como desodorante eficaz y seguro.
No se preocupan por mantenerse limpios
Sin embargo, la higiene personal y el desodorante no eran muy importantes en Inglaterra en la época de los vikingos. Se dice que un clérigo inglés, John Wallingford, se quejaba de que los vikingos «se peinaban todos los días, se bañaban todos los sábados y se cambiaban regularmente de ropa, para poder socavar la virtud de las mujeres inglesas casadas e incluso seducir a las hijas de los nobles para que fueran sus amantes «*. El súper higiénico baño de los vikingos todos los sábados suena muy poco higiénico para los estándares modernos, así que sólo podemos imaginar lo mal que olían los demás. Puede que pienses: «es como si a algunas personas de la historia no les gustara estar limpias»… pues es curioso que pienses eso. Se dice que el emperador francés Napoleón escribió las siguientes palabras a su esposa Josefina: «J’arrive. Ne te lave pas». Traducido, esto significa «Estaré en casa pronto. No te laves»
Desodorante moderno
El desodorante en su forma comercial actual sólo existe desde hace unos cien años, y desde la invención de este primer «desodorante» oficial ha evolucionado y mejorado enormemente. Este primer desodorante fue MUM, inventado en 1888, y era una crema que se aplicaba con las yemas de los dedos; los fabricantes de MUM también inventaron el aplicador roll-on unos años más tarde, tras inspirarse en el bolígrafo. El primer antitranspirante fue EverDry, introducido en 1903. EverDry era tan ácido que se comía la ropa e incluso se sabe que los antitranspirantes modernos dañan la ropa dejando manchas amarillas permanentes en la zona de las axilas.
La invención de las formas en aerosol y en barra de los antitranspirantes y desodorantes
En la década de 1950, aparecieron en el mercado los antitranspirantes y desodorantes en aerosol que contenían zirconio de aluminio y propulsores de clorofluorocarbono (CFC). Estos desodorantes en aerosol eran extremadamente populares y representaban más del 80% de todas las ventas de desodorantes. Sin embargo, en 1977 la FDA prohibió el uso de aluminio zirconio porque existían grandes dudas sobre el efecto de este agente al ser inhalado. La Agencia de Protección del Medio Ambiente desaconsejó el uso de propulsores de clorofluorocarbono por su efecto sobre la capa de ozono. Rápidamente se encontraron ingredientes alternativos, pero incluso ahora se sigue especulando y discutiendo sobre la seguridad de estos desodorantes y antitranspirantes.
A finales de la década de los setenta, los desodorantes y antitranspirantes en barra ganaron popularidad y, aunque todavía existen cremas, sprays, roll-ons y polvos, las barras siguen siendo las más populares incluso ahora.
Desodorantes naturales modernos
Los desodorantes naturales han ganado popularidad a lo largo de los años como una alternativa segura y ecológica a los desodorantes químicos. Los desodorantes naturales se fabrican con las mismas sales minerales que se utilizaban en la antigüedad en toda Asia, pero se formulan con tecnologías modernas y vienen en una variedad de estilos prácticos y fáciles de aplicar. La sal del desodorante impide la formación de olores, ya que inhibe el crecimiento de las bacterias en lugar de obstruir los poros con productos químicos para inhibir el acto natural de la sudoración. Los desodorantes Salt of the Earth de Crystal Spring son eficaces durante 24 horas, no están perfumados y no dejan las embarazosas marcas blancas en la ropa. Son respetuosos con el medio ambiente, sin CFC, y no se prueban en animales.
* Ian Riddler. Two Late Saxon Combs from the Longmarket Excavations. Canterbury’s Archaeology 1989/1990, The 14th Annual Report of Canterbury Archaeological Trust Ltd. Consultado el 15/5/99.