La oración puede implicar mucho más de lo que usted piensa, ya que la gente puede recurrir a ella para obtener orientación personal durante un momento difícil. Si necesita ayuda o fuerza para evitar un divorcio, puede ser el momento de que desarrolle su propia oración.
Con las parejas de todo el mundo que se dirigen a Dios durante los momentos más difíciles de sus vidas, es fácil entender cómo puede sentir consuelo, resolución y tranquilidad al acudir a un poder superior.
Ya sea que esté buscando detener un divorcio o quiera examinarse profundamente a sí mismo y a su relación, esta guía puede ayudarle a aprender cómo detener el divorcio con la ayuda de la oración.
Lo primero que va a necesitar hacer es determinar cuál es el problema en su vida y en su relación. ¿Está el divorcio amenazado por conflictos de personalidad? ¿O una persona traicionó la confianza de la otra?
Al tomarse el tiempo para identificar cuáles son los problemas subyacentes, usted podría tener una idea más clara de lo que necesita para pedirle a Dios que le ayude. La oración dirigida sólo va a funcionar si usted sabe lo que está buscando.
Paso 2: Saber lo que quiere
Es hora de reflexionar y averiguar qué es lo que quiere de su matrimonio. ¿Es algo tan simple como detener el divorcio antes de que los procedimientos comiencen realmente, o está buscando algo más?
Para determinar si debe rezar por usted o por su ser querido, va a necesitar reflexionar sobre los problemas que tiene dentro de su matrimonio.
Si se pregunta qué puede hacer para ayudar a que su relación sea más fuerte, podría darle la base correcta para corregir cualquier error y construir un matrimonio más fuerte.
Paso 3: Desarrollar la oración
Usted sabe lo que busca y lo que quiere de su matrimonio. Ahora es el momento de desarrollar la oración.
Asegúrese de incluir todas las cosas con las que está buscando ayuda. Por ejemplo, puedes decirle a Dios que necesitas fuerza para ser más comprensivo con las preocupaciones de tu cónyuge.
Si has estado echando toda la culpa a tu pareja, puedes pedirle perdón por tus propios pecados. Al final del día, su cónyuge puede estar buscando el divorcio por algo que usted ha hecho.
También asegúrese de pedir orientación y apoyo para su ser querido, ya que también estará pasando por un momento difícil y necesitará confiar en la ayuda de Dios.
Paso 4: Recitar la oración
Recitar la oración podría ser la parte más importante del proceso, ya que puede ayudar a recordar afirmaciones positivas para mantenerte motivado hacia la reparación de tu matrimonio.
¿Te encuentras lidiando con un día difícil, o estás reflexionando sobre problemas que encontraste en el pasado? En cualquier caso, podría intentar asegurarse de recitar la oración tan a menudo como sea posible.
Incluso podría descubrir que si le pide a su cónyuge que rece con usted al principio y al final de cada día, esto puede ayudar a fortalecer su vínculo, no sólo con el otro, sino también con su fe.
Ejemplos de oraciones para detener el divorcio
Oraciones cortesía de Prayer Closet Ministries.
1. «Padre, te pido que nos liberes a mí y a mi esposo/esposa del egocentrismo. Concede que yo y mi esposo/esposa tengamos un corazón de siervo» (Efesios 2:3; 2 Timoteo 3:2; Mateo 20:28; Filipenses 2:5-11).
2. «Padre, en el nombre de Jesús, te pido que atesores la obra de Satanás de este matrimonio. Nada le gustaría más que destruir nuestro matrimonio. Te pido que detengas su obra en nuestras vidas y destruyas sus ataques contra este matrimonio» (Juan 8:44; Génesis 3:11-13).
3. «Padre, te pido que nos hablemos la verdad el uno al otro en amor. Haz que compartamos honestamente nuestros sentimientos sin ser arrogantes o rencorosos. Por medio del amor y la honestidad, permítenos resolver nuestras diferencias» (Efesios 4:25; 1 Juan 4:7, 11).
4. «Padre, te ruego que nos lleves a una relación más íntima contigo. Haz que te anhelemos como el ciervo anhela el agua. Concédenos un hambre en el alma por Ti. Crea en nosotros un espíritu de oración, especialmente el uno por el otro» (Salmo 42:1-2, 63:1; Juan 17:3; Colosenses 4:2).
El divorcio puede ser una experiencia increíblemente difícil y traumática, especialmente para las parejas que entraron en su matrimonio con la idea de estar juntos para siempre. Usted podría pensar que la amenaza del divorcio significa que el matrimonio es finito, pero no tiene por qué serlo. Trabajando juntos con la ayuda de la oración, pueden fortalecer el vínculo entre los cónyuges y trabajar para reparar su relación.