Las velas perfumadas son una forma popular de crear un ambiente agradable en casa. Aromas como la lavanda, el jazmín y el sándalo pueden ser relajantes y vigorizantes. Y durante las fiestas, muchas personas consideran que el cálido resplandor y el aroma del pino, el pan de jengibre o la canela hacen que la habitación sea más festiva. Por desgracia, la mayoría de las velas perfumadas producidas en masa pueden tener un impacto negativo en la calidad del aire interior (IAQ). Desde la cera hasta la mecha, pasando por la propia fragancia, la vela aromática media puede liberar sustancias químicas nocivas en el aire, incluso cuando no está encendida. Así que mientras usted y su familia disfrutan de la fragancia de las velas aromáticas en su casa, pueden estar perjudicando su salud.

Cera de parafina

La mayoría de las velas están hechas de parafina, un subproducto del petróleo. Para crear la parafina, los residuos del petróleo se blanquean químicamente, se desodorizan y se convierten en cera. Cuando se quema, la parafina puede liberar en el aire compuestos orgánicos volátiles (COV) tóxicos, como la acetona, el benceno y el tolueno, que son cancerígenos conocidos. Son las mismas sustancias químicas que se encuentran en las emisiones de los combustibles diésel y se sabe que causan alergias, ataques de asma y problemas de piel. Un estudio de la Universidad del Sur de Florida demostró que las velas de parafina emiten bajos niveles de benceno incluso cuando no están encendidas.

Además de liberar sustancias químicas tóxicas, la quema de parafina produce hollín con partículas que pueden permanecer suspendidas en el aire durante horas. El estudio de la Universidad del Sur de Florida demostró que estas partículas de hollín ultrafinas son similares a las de los gases de escape de los motores diesel tanto en su tamaño como en su composición. Penetran profundamente en los pulmones y son absorbidas por el torrente sanguíneo. Las partículas ultrafinas están relacionadas con las alergias, el asma y otras enfermedades respiratorias, así como con los infartos de miocardio, los accidentes cerebrovasculares e incluso el cáncer. Y un estudio de la Agencia de Protección Medioambiental de EE.UU. demostró que las emisiones de hollín de las velas que contienen fragancias son significativamente más altas que las de las velas no perfumadas.

Fragancias químicas

Otro problema de las velas perfumadas es que los productos químicos que utilizan para crear un aroma agradable no suelen ser nada saludables. La mayoría de las velas perfumadas utilizan fragancias y tintes sintéticos que emiten COV peligrosos incluso a temperatura ambiente. Entre los COV que se emiten habitualmente relacionados con el aroma de las velas se encuentran el formaldehído, los destilados del petróleo, el limoneno, el alcohol y los ésteres. Estas sustancias químicas nocivas pueden causar problemas de salud que van desde dolores de cabeza, mareos y síntomas de alergia hasta ataques de asma, infecciones de las vías respiratorias e incluso cáncer.

Mechas con núcleo

Muchas velas tienen mechas con núcleo hechas de algodón que se envuelven alrededor de un soporte metálico. Este diseño ayuda a evitar que la mecha caiga en la cera. Esto es especialmente útil para las velas perfumadas, ya que los aceites de fragancia ablandan la cera y permiten que las mechas sin núcleo se debiliten.

En el pasado, el plomo se utilizaba comúnmente en las mechas con núcleo, especialmente en las velas importadas del extranjero. Sin embargo, tras determinar que estas mechas podían suponer un riesgo de envenenamiento por plomo para los niños pequeños, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de EE.UU. prohibió en 2003 la fabricación y venta de todas las velas con mechas de plomo. Ahora, en su lugar se utilizan generalmente el zinc y el estaño. Sin embargo, todas las mechas con núcleo metálico liberan trazas de metales pesados en el aire cuando se queman. Y las mechas con núcleos de zinc y estaño pueden seguir liberando pequeñas cantidades de partículas de plomo.

Alternativas más seguras

Si todavía anhela el agradable ambiente y el aroma de las velas perfumadas, no desespere. Hay formas más seguras de aromatizar el aire. He aquí algunas sugerencias:

  1. Utilice aceites esenciales para perfumar. Los aceites esenciales pueden colocarse en un difusor o en el agua de la bañera para crear un aroma maravilloso.
  2. Hierve especias a fuego lento. Coloque especias como la canela en rama, el clavo y la nuez moscada en una olla con agua y déjela hervir a fuego lento.
  3. Cree popurrí. Los elementos secos como flores, bayas, cáscaras de fruta, virutas de madera y especias pueden colocarse en cuencos o bolsas de tela y colocarse por toda la casa.

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