La falla de los frenos es fácilmente una de las averías más peligrosas que pueden ocurrir en su vehículo. Hay muchas razones por las que los frenos fallan, pero incluso si usted no es un mecánico, debe conocer los signos de fallo de los frenos para que pueda llevar su coche al servicio tan pronto como empiece a notarlos. Aquí hay seis maneras de saber si sus frenos están empezando a funcionar mal.
Su pedal de freno se ha caído
Un pedal de freno que se cae es uno de los signos clásicos de fallo de los frenos. Cuando sus frenos están en buenas condiciones, el pedal se mantendrá en la misma posición todos los días. Si cae hacia el suelo, será imposible no notarlo. Esto significa que sus frenos están probablemente desajustados, y podría significar que hay un fallo mecánico o aire en el sistema de su vehículo.
Sus frenos chirrían o rechinan
Los frenos que chirrían o rechinan no son sólo una molestia. En realidad son un problema bastante serio, porque estos ruidos pueden indicar que sus pastillas de freno se están desgastando y/o que el freno está desgastado hasta los rotores.
Su pedal de freno está vibrando
Cuando decimos que está vibrando, no nos referimos sólo al ligero temblor causado por su sistema antibloqueo de frenos (ABS) cuando pisa los frenos con mucha fuerza. Nos referimos a un temblor que se produce cuando se pisa el freno con normalidad, a menudo acompañado de un ruido de parpadeo y un volante difícil de controlar. El ruido de traqueteo suele producirse por rotores deformados, que los frenos no pueden sujetar tan fácilmente para detener el vehículo.
Cree que su alineación está mal
Si su coche tira hacia un lado o hacia otro cuando frena, no lo confunda automáticamente con una ligera desalineación. Si nota el tirón sólo cuando aplica presión a los frenos, podría significar que uno de los cilindros o pinzas de las ruedas del coche está agarrotado o congelado. También podría significar que hay una fuga de líquido en las pastillas o zapatas de freno.
Tienes que pisar los frenos con más fuerza
Si empiezas a notar que tienes que pisar los frenos con más fuerza de lo habitual para reducir la velocidad o detenerte, podría significar que uno de tus frenos o un eje no está funcionando como debería. No dejes que esto continúe durante un tiempo; llama a tu mecánico y lleva tu coche para que lo revisen lo antes posible.