¿Cómo crece el boniato?
Los boniatos están entre los más fáciles de cultivar de la familia Convolvulaceae (patata). Les encantan los climas tropicales con suelos arenosos y mucha luz porque no les gusta el frío ni la humedad. Las vides de boniato no son exigentes: se extenderán a lo largo del suelo hasta 4 metros o saldrán en cascada de tus macetas hasta donde puedan estirarse. Sus exuberantes hojas añaden un toque decorativo de color a tu jardín y cosecharás los frutos de los boniatos cultivados en casa en unos 100 días.
Si quieres cultivar tus propias batatas en casa, simplemente coloca media batata orgánica en agua y déjala en el interior en un lugar soleado y en un par de semanas tendrás enredaderas por todas partes
Cómo cocinar las hojas de batata
Cuando se trata de cocinar las hojas de batata, trátalas como otras verduras de hoja oscura. Aquí tienes un par de formas de cocinarlas:
- En crudo: como cualquier hoja verde oscura puedes añadirlas a tus ensaladas
- Salteadas: pícalas toscamente y saltéalas con un poco de mantequilla y ajo
- Hervidas: hervir las hojas de boniato en rama te ayudará a eliminar su amargor.
- En zumo: añádelas a tu zumo diario para darle un toque vitamínico.
Aquí tienes una recopilación de nuestras recetas de boniato favoritas.
Beneficios para la salud de las hojas de boniato
No sólo las vides de boniato son bajas en calorías, con sólo 12 calorías por taza, sino que son una gran fuente de numerosas fibras, antioxidantes, vitaminas esenciales A, B, C, D, E y K y minerales como la niacina, la tiamina y el betacaroteno.
Fibra: las hojas de boniato están llenas de fibra que ayuda a regular los movimientos intestinales y el tracto gastrointestinal.
Inflamación: también tienen un alto contenido en betacaroteno, que es un antiinflamatorio natural.
Salud ósea: La vitamina K (en la que las vides de boniato tienen un alto contenido) ayuda a reducir el riesgo de osteoporosis y fracturas de cadera.