La risa es uno de los mejores aliados para estrechar el vínculo con los niños y ayudarles a mantener a raya el estrés y liberar las tensiones. De hecho, la risa contribuye a regular las catecolaminas circulantes y los niveles de cortisol, a la vez que reduce la tensión muscular, incrementa el oxígeno en sangre y estimula la producción de endorfinas, según reveló el libro Psicología de la salud y calidad de vida.
Reír también es un recurso muy útil para fortalecer el sistema inmunitario y mejorar el funcionamiento del sistema cardiaco, de la misma manera que contribuye a prevenir alteraciones como la depresión. Asimismo, la risa es un ejercicio excelente para fomentar la resiliencia en los niños y estimular valores positivos que le ayuden a enfrentar los problemas de la vida cotidiana desde una perspectiva enriquecedora.
En este sentido, los chistes pueden ser un recurso muy valioso para motivar la risa y pasar un rato diferente y entretenido en familia, sobre todo aquellos que resultan fáciles de entender y que transmiten valores positivos como los chistes de animales. Este tipo de chiste además de ser muy divertido, contribuye a que los peques aprendan nuevos detalles que no conocían sobre el mundo animal.
Chistes de animales para reír con los niños
- Era un caballo tan vago, pero tan vago, tan vago, que cuando le ponían la silla de montar, se sentaba en ella.
- ¿Qué hace un pez en el mar?
Nada. - ¿Qué hace un perro con un taladro?
Ta-ladrando. - En una granja hay una vaca, una gallina y un caballo y todos tienen 14 meses. ¿Quién es el mayor?
La gallina porque tiene 14 meses ¡y pico! - ¿En qué idioma le habla una tortuga a su hijo tortuguita?
En tortugués. - ¿Cuál es el animal que más dientes tiene?
El ratoncito Pérez. - Un ratón le dice a una rata:
¿Qué haces ahí sentada?
Estoy esperando un ratito. - Una serpiente le pregunta a su madre:
«Mamá, ¿somos venenosas?»
Su madre le contesta:
«¿Por qué quieres saber?»
La serpiente responde:
«Porque me mordí la lengua». - Un gato caminaba por un tejado maullando:
¡Miau, miau!
En eso se le acerca otro gato repitiendo:
¡Guau, guau!
Entonces el primer gato le dice:
Oye, ¿por qué ladras si tú eres gato?
Y el otro le contesta:
¿Es que uno no puede aprender idiomas? - Un perro español y un zorro inglés chocan por accidente en una céntrica calle de Londres. El zorro se disculpa:
Oh, I´m sorry.
Y el perro le contesta:
Oh, I´m perry. - Dos pulgas iban conversando por la calle.
En un momento una le pregunta a la otra:
¿Qué hacemos, vamos andando o cogemos un perro? - ¿Qué le dice un chinche a una chinche?
Te amo chincheramente - Hay dos piojos en la cabeza de un señor calvo, y uno le dice al otro:
Alfredo, vámonos de aquí que este terreno ya está pavimentado. - ¿Qué hace una vaca pensando?
¡Hace leche concentrada!
- Una iguana se encuentra con otra y le dice:
Hola, ¿cómo te llamas?
Iguana, ¿y tú?
Iguanita que tú. - ¿Qué le dice Tarzán a un ratón?
Tan pequeño y con bigote.
¿Qué le responde el ratón a Tarzán?
Tan grandote y con pañal. - Una madre mosquito les dice a sus hijos:
Hijos, tengan mucho cuidado con los humanos y no se acerquen a ellos porque siempre quieren aplastarnos.
Entonces, uno de sus hijos contesta:
No, Mami, eso no es cierto. El otro día un humano se pasó la tarde aplaudiéndome. - Una oveja le pregunta a su mamá:
¡Mamá, mamá!, ¿puedo ir a una fiesta?
Beeee, beeee - ¿Por qué los elefantes no chatean?
Porque le tienen miedo al mouse. - Una señora está en la puerta de su casa con su gato, pasa un señor y le pregunta:
¿Araña?
Y la señora le contesta:
¡NO, gato! - Las ovejas están jugando al futbol. Una de ellas lanza el balón muy lejos y le dice a otra oveja:
Veeeeeeeee
Y la otra responde:
Veeeeeeee túuuuuuu - Un gato y un gallo van caminando por la orilla de un río. El gato se cae al agua y grita:
Miaoogo, miaoogo.
A lo que el gallo responde:
Kikirikihaga, kikirikihaga. - Dos animales se encuentran y uno dice al otro:
Yo soy un perro-lobo porque mi padre era perro y mi madre una loba. ¿Y tú?
Pues yo soy un oso-hormiguero. ¡Anda ya! - Un pez le dice a otro:
¿Qué hace tu padre?
Y el otro le contesta:
NADA ¿Y el tuyo?
NADA también. - ¿Qué le dice un pato a otro pato?
¡Estamos empatados! - Entra un hombre a una pajarería y pregunta:
¿De qué raza es el loro?
El dueño contesta: Lo ignoro.
Y el hombre dice:
¡Que loignorito tan bonito! - Un loco va por la calle lanzando sal y un señor le dice:
¿Por qué está lanzando sal en la calle?
Para que los cocodrilos no nos ataquen.
¡Pero si no hay cocodrilos!
¡Porque yo lanzo sal! - ¿Qué le dijo un ganso a una gansa?
Ven ganza. - Dos gusanos hablan animadamente. Cuando uno de ellos se despide, el otro le pregunta:
¿A dónde vas?
A dar la vuelta a la manzana. - ¿Por qué los perros mueven la cola?
Porque sola no se mueve.